Sólo cinco establecimientos educativos de la ciudad de Tarija contarán, en 2014, con la infraestructura que permita aplicar a “cabalidad” la nueva malla curricular que exigela Ley AvelinoSiñani-Elizardo Pérez.
Esos colegios son “Bolivia”, “María Laura Justiniano”, “Juan XXIII”, “Eulogio Ruiz” y “Juana Azurduy de Padilla”. Todos están en construcción. Según el director de Educación del municipio de Tarija, Luis Martínez, el avance de la obra en esas infraestructuras es de un 50, 70 y 80 por ciento.
Mientras que en los demás establecimientos, la implementación de la nueva malla curricular continuará en ambientes improvisados.
Falta infraestructura
La infraestructura en los establecimientos educativos es el principal obstáculo para aplicar la nueva malla curricular, que exige un aprendizaje de carácter más práctico y comunitario, cuatro meses después del inicio de las actividades escolares.
A principios de año, Martínez aseguró que la infraestructura de los establecimientos estaba adecuada a las exigencias dela Ley EducativaAvelino Siñani-Elizardo Pérez.
Sin embargo, en una visita de El Nacional, ayer, 10 de junio, al colegio Lindaura Anzoátegui de Campero y a la unidad educativa Aniceto Arce se verificó que no tiene las “condiciones necesarias” para las clases.
Rubén Maigua y María Elena Pérez, profesores del colegio “Lindaura Anzoátegui de Campero” y del “Aniceto Arce”, respectivamente, coincidieron al indicar que en los cursos hay hasta 40 estudiantes, quienes no pueden ser ubicados en forma circular, como exige la nueva ley, y permanecen como en pasados años, en filas, por el reducido espacio de las aulas.
Ambos consideran que la cantidad adecuada de estudiantes para que puedan asimilar mejor la enseñanza es entre 20 y 25.
Para ambos colegios hay proyectos de construcción de una nueva infraestructura. En el caso del colegio Lindaura Anzoátegui de Campero, según su directora Carmen Chuquimia, el plan viene desde el pasado año, pero no hay avances ni fecha para el inicio de los trabajos.
Chuquimia indicó que un salón y un depósito fueron habilitados para acoger a estudiantes de los dos cursos que fueron sumados a secundaria.
La directora del colegio “Aniceto Arce”, Ana María Bejarano Arce, dijo que ese establecimiento también tiene un proyecto de construcción, pero que no tomaron en cuenta las sugerencias de los maestros para ese plan.
El director distrital de Educación, Marcelino Vidaurre Cazón, por su parte, dijo que la aplicación de la nueva malla curricular es un proceso, por lo que hay dificultades en su implementación, principalmente en la infraestructura.
elAPUNTE:
El modo de calificar tendrá cambios
El modo de calificar a los estudiantes con la nueva malla curricular tendrá cambios de un bimestre a otro.
La directora del colegio “Aniceto Arce”, Ana María Bejarano, indicó que el primer bimestre fueron menos los aspectos tomados en cuenta para la calificación de los estudiantes, en comparación del segundo bimestre.
Dijo que para el primer bimestre la calificación no fue bajo un reglamento como ocurrirá a partir del segundo bimestre.
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