Tras algunos cambios de decisión, movilizaciones y demora, finalmente se impuso la modalidad de sorteo para inscribir a los alumnos de primeros cursos en las unidades educativas con sobredemanda y con ello ya no habrá motivos para realizar filas anticipadamente en los próximos años. De hecho, esta experiencia, según las autoridades, abre paso para que el registro sea vía internet.
Ayer, lunes, en el coliseo Jorge Revilla Aldana hubo más gente de la esperada y por eso el sorteo de plazas comenzó dos horas tarde.
Como estaba previsto, las puertas se abrieron a las 8:00, pero el ingreso a un principio fue lento a tal punto que algunos padres de familia fueron a reclamar a los policías porque la fila no avanzaba; la cola casi daba una vuelta al manzano del escenario deportivo.
Pese a que la fila era larga y había algo de premura en ingresar al coliseo, la Policía hizo un control efectivo a la cabeza del comandante Departamental, Víctor Hugo Oña, y eso permitió que todo se desarrollara sin mayores contratiempos.
Además, al ver la gran cantidad de gente, las autoridades educativas decidieron habilitar otra puerta de entrada y eso favoreció a que las personas ingresaran más rápido.
La nueva modalidad de inscripción por sorteo demostró que de nada sirvió que algunos padres de familia durmieran haciendo fila o llegaran siete horas antes del ingreso, pues tuvieron que esperar a que entrara toda la gente que hizo fila a partir de las 8:00.
EL REGISTRO
Para participar del sorteo, los padres de familia se dirigieron a las mesas de registro identificadas con el nombre de la unidad educativa, donde presentaron el certificado de nacimiento más dos fotocopias y, a cambio, recibieron un ticket de color de un talonario. Luego, pasaron a sentarse en los espacios que les correspondía identificados con grande letreros. En esta parte fue importante la labor que desarrollaron los funcionarios de educación ayudando a que las personas se ubicaran correctamente.
Alrededor de las 10:00, la gente que había entrado temprano se impacientó, gritó y silbó para que el sorteo iniciara, pero aún había personas ingresando al coliseo.
Mientras eso sucedía, algunas personas se acercaron a los medios de comunicación para denunciar que había padres de familia que estaban volviendo a pasar el certificado de nacimiento de sus hijos a sus familiares que también hacían fila para probar suerte en el mismo establecimiento o en otra unidad educativa. Sin embargo, a quienes así actuaron no les fue bien: al momento de leer el número premiado, la mamá debía presentar el certificado original, y de no tenerlo, perdía la plaza. Este diario observó algunos casos.
EL SORTEO
El inicio del sorteo fue un tanto caótico. No se podía escuchar la explicación de las autoridades y no se sabía por qué establecimiento iniciaría el sorteo. Tras una discusión de unos minutos, se decidió que el sorteo de plazas se realizara en todos los establecimientos al mismo tiempo, con la presencia de comisiones en cada uno de los grupos formados. Este proceso se llevó a cabo sin mayores contratiempos y en el marco del respeto y a los resultados, pues los padres de familia no presentaron objeciones al proceso.
Mientras se realizaba el sorteo implícitamente se aplicaron dos normas: la primera, que si no estaba el papá del número premiado éste se volvía a sortear; la segunda, que si no presentaba el certificado original, se anulaba la premiación. En efecto, eso sucedió.
Los que quedaron descontentos fueron los padres de familia que querían inscribir a sus hijos en el colegio Junín con el número de plazas que se estaba ofreciendo: 37 para 6° de primaria y ocho para 1° de secundaria.
Ante los reclamos, la directora Departamental de Educación de Chuquisaca, Ana María Quinteros, ordenó que se abra una investigación para saber cuáles fueron los motivos para ofertar tan bajo número de plazas. Inicialmente debieron ser 60 y 20 respectivamente. Ahí mismo se conoció que uno de los motivos fue que las plazas están reservadas para los hermanos de los estudiantes de esa unidad educativa, como dispone la norma.
COMPLETAR EL PROCESO
Todos los padres de familia que fueron favorecidos con una plaza presentaron el certificado de nacimiento original del niño ese mismo instante y hoy deberán completar el registro en sus respectivas unidades escolares.
INSTRUCTIVA Y MOVILIZACIÓN
El sorteo de plazas en unidades donde la demanda fue mayor a la oferta se aplicó en cumplimiento de la instructiva ministerial 01 del Ministerio de Educación que fue resistida la semana pasada por los padres de familia con movilizaciones en el frontis de la Dirección Departamental de Educación. Ellos pedían que se respetaran las filas y listas elaboradas con días de anticipación. Asimismo, rechazaron el registro por internet algo que al final fue aceptado por las autoridades educativas.
De acuerdo al cronograma, hoy más se inscribirá para los primeros cursos; a partir de mañana, de segundo a sexto de primaria y secundaria hasta el inicio de clases.
Sin beneficio
De nada sirvieron filas, listas y movilizaciones que realizaron los padres de familia en su afán de impedir que este año más se inscriba sin considerar internet y sorteo. Lograron que se descarte el primero y no el sorteo.
En otras unidades educativas
Como estaba previsto, ayer se abrieron las inscripciones escolares y los alumnos de los primeros cursos de inicial, primaria y secundaria aseguraron sus plazas antes que los demás.
A excepción de las unidades educativas kínder Vaca Guzmán, Echeverría, Amalia Vda. de Vargas, Jaime Mendoza, escuelas Adolfo Siles, Nicolás Ortiz, Daniel Calvo y colegio Junín, en la mayoría de los establecimientos no hubo necesidad de ir al sorteo.
Sin embargo, no todo fue fácil. Una noche antes los padres de familia en el kínder San Vicente de Paul hicieron fila y en base a ese orden pidieron que se inscriba a sus hijos, debido a que las personas que no lograron una plaza durante la mañana en el coliseo Jorge Revilla aumentaron considerablemente el número de demandantes.
Luego de discusiones, los papás que estaban primeros en la fila impusieron su criterio y se inscribió a los alumnos hasta agotar las plazas.
Durante la mañana de ayer, padres de familia denunciaron que en la unidad educativa Mariscal Sucre se estaba cobrando Bs 30 mediante un depósito bancario. Fue la directora Distrital de Educación de Sucre, Carmen Rosa Ayma, quien mandó se suspendiera ese cobro considerado de arbitrario.
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