Las librerías de la ciudad y los puestos de venta de material escolar de La Cancha permanecieron repletos el fin de semana, hasta altas horas de la noche. La demanda de útiles rebasó las expectativas de los vendedores, pero también generó protestas entre los padres de familia, por el elevado precio de los libros y las largas listas de requerimientos para la educación de sus hijos.
“Mi hijo pasó a primero de secundaria, las pensiones aumentaron y para colmo sus materiales son muy caros, sólo en 6 libros estoy gastando Bs 536. Aparte debo comprar cuadernos, carpetas, hojas, archivadores, colores, bolígrafos, libro de quechua y otras cosas, gastaré unos Bs 850 sólo en un hijo ¿y los demás? La educación es demasiado cara en Bolivia, ya no alcanza el dinero”, se quejó Adriana de Rodríguez.
En Bolivia, el sueldo mínimo nacional es de Bs 815, pero la lista de material escolar de un solo hijo puede superar ese monto.
Las listas del ciclo inicial (prekinder y kinder) también fueron un dolor de cabeza para los padres. Las exigencias de colores, pinturas de ciertas marcas, papeles de diferentes texturas, revistas Bill Kids, carpicolas, cintas, lanas y un sinfín de productos para desarrollar la motricidad de los pequeños, causaron la molestia de padres que calcularon sus gastos en Bs 700. Algunos, sin embargo, agradecieron a maestros del kinder Petrona Navia que trataron de equilibrar los gastos fomentando que los compartan por grupos. Esas listas no sobrepasaron los Bs 150. “Debemos entregar todo forrado el lunes (hoy), pero no nos han pagado en el trabajo, tienen que tener paciencia”, dijo Ariel Montaño, que tiene tres hijos.
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