En la ciudad de La Paz, al menos 30 establecimientos adecuaron sus infraestructuras a los requerimientos del nuevo currículo (lista y contenido de materias), vigente desde este año, que divide el sistema educativo regular en seis años de primaria y seis de secundaria.
El jefe de la Unidad de Seguimiento y Supervisión de la Dirección Departamental de Educación (DDE), Néstor Acarapi, dijo que en cada uno de los distritos educativos de La Paz -hay tres- se presentaron unos diez reportes sobre la adecuación de las infraestructuras.
“En ninguno de los casos se hizo forzosamente (la adecuación) y si hubo algunos casos esporádicos, (los directores) serán sancionados”, advirtió Acarapi.
A través de la Resolución Ministerial 001 / 12, el Ministerio de Educación instruyó a los establecimientos organizar su infraestructura según la nueva configuración del sistema educativo regular. Hasta el año pasado, primaria iba de primero a octavo y secundaria, de primero a cuarto.
El parágrafo 3 del artículo 34 de esta disposición indica, sin embargo, que la adecuación será previa evaluación de la infraestructura y el techo presupuestario, es decir ítems, del colegio.
Según datos de la Alcaldía de La Paz, en el municipio hay 436 unidades educativas.
Los problemas
Acarapi explicó que el principal problema que enfrentó la DDE en la reestructuración de las unidades educativas fue “el movimiento que se hizo a los maestros (de un turno a otro) y además la falta de infraestructura” en algunos colegios.
Algunass de las unidades que tropezaron con dichos problemas fueron Hugo Dávila, 24 de Junio, Germán Busch, Eduardo Idiaquez, Juan Heishenn y Liceo Venezuela, entre otros.
Contó el caso del colegio 24 de Junio B (turno tarde): “Éste funcionaba sólo como sexto, séptimo y octavo (de acuerdo a la Reforma Educativa) y ahora se quedó sólo con los estudiantes de sexto, porque los maestros y alumnos de séptimo y octavo pasaron al 24 de Junio A (turno mañana), que es secundaria”.
Para resolver el problema, la directora del establecimiento -según Acapari- amplió la inscripción a primaria y ahora en cada curso hay entre 20 y 30 estudiantes, “a los cuales no se los puede echar a estas alturas”.
Informó que todos los colegios que vayan quedando sin alumnado serán cerrados.
Agregó que en varios establecimientos donde no había la infraestructura adecuada para la adecuación se suspendió el proceso. Por ejemplo, la directora del colegio Germán Busch turno mañana, Yolanda Valencia, contó que este establecimiento aún funciona de tercero a sexto de secundaria (ciclo medio, en el antiguo sistema), aunque debió ampliar sus aulas hasta primero.
“La junta escolar y los del turno tarde se opusieron al cambio. Incluso fui secuestrada (encerrada en un aula) para que no ocurra aquello”, recordó.
En el Juan Heishenn hubo conflictos por falta de aulas, pero al final no se realizaron cambios en infraestructura y sigue funcionando de primero a octavo de primaria (antiguo sistema). “Un grupo de estudiantes se fue al colegio Lindermann, pero no había infraestructura y por eso tuvieron que retornar”, dijo Luz Ampuero, su directora.
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