Las concejalas Mirtha Condori (MAS) y Mónica Alvis (UNE) denunciaron ayer que la empresa que se adjudicó la provisión del desayuno escolar en Quillacollo entregó fruta podrida y más pequeña de lo establecido en el contrato.
Según Condori, la denuncia fue presentada por la directora de la unidad educativa San Martín de Porres, turno nocturno. “Esto es discriminatorio, porque al turno de la tarde le entregaron un desayuno de mayor calidad”, dijo Condori.
Por ese motivo, la concejala informó que se pidió un informe a la dirección de educación del municipio acerca de este tema.
Dijo que se analizará la posibilidad de iniciar acciones legales contra la empresa que incumplió con su trabajo.
La concejala Alvis dijo que comenzarán a realizar operativos sorpresa en diferentes unidades educativas, todos ellos abocados a verificar el estado de los productos que la empresa adjudicataria entrega a los escolares.
Elder Villarroel, director de Educación de Quillacollo, afirmó que solicitará un informe pormenorizado al responsable del desayuno escolar del municipio, además que se evaluará la posibilidad de rescindir el contrato con la empresa adjudicataria. “Hemos verificado que está en mal estado. Por contrato, ellos deben remitir el producto el jueves, pero llegó ayer (miércoles)”, dijo Villarroel.
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