A pesar que el Ministerio de Educación dio el instructivo de que los padres de familia no deben dormir en las puertas de los colegios, no se hizo caso al mismo y en algunos establecimientos educativos de la ciudad, éstos duermen haciendo filas para inscribir a sus hijos.
En la puerta del colegio Jorge Oblitas padres de familia armaron sus carpas para no perder sus puestos y así poder inscribir a sus hijos en esa unidad educativa.
Según declaraciones de un padre de familia, Elvis Peña, sólo estarían en el colegio hasta las 00.00 horas, pero es evidente que no será así, ya que en menos de 10 minutos llegaron carpas y las armaron entre todos.
Realmente este es un incumplimiento a los instructivos que emite el Ministerio de Educación, ya que nadie hace caso a las normas que se dictan.
No sólo es en ese colegio que se hacen filas, puesto que se vieron padres de familia en otros establecimientos educativos en similar situación, tal es el caso de los colegios Arce, Bolívar, Ignacio León, Dalence y otros.
Las versiones para no hacer caso al instructivo es que suponen que existen otros padres de familia que de igual manera quieren inscribir a sus hijos, pero que no fueron a hacer fila.
El temor es que si ellos dejan sus filas otros les ganen y ya no puedan inscribir a sus niños. Las hileras que se forman, por lo general, son para alumnos nuevos que ingresarán al curso Primero de Primaria.
En la puerta del colegio Jorge Oblitas padres de familia armaron sus carpas para no perder sus puestos y así poder inscribir a sus hijos en esa unidad educativa.
Según declaraciones de un padre de familia, Elvis Peña, sólo estarían en el colegio hasta las 00.00 horas, pero es evidente que no será así, ya que en menos de 10 minutos llegaron carpas y las armaron entre todos.
Realmente este es un incumplimiento a los instructivos que emite el Ministerio de Educación, ya que nadie hace caso a las normas que se dictan.
No sólo es en ese colegio que se hacen filas, puesto que se vieron padres de familia en otros establecimientos educativos en similar situación, tal es el caso de los colegios Arce, Bolívar, Ignacio León, Dalence y otros.
Las versiones para no hacer caso al instructivo es que suponen que existen otros padres de familia que de igual manera quieren inscribir a sus hijos, pero que no fueron a hacer fila.
El temor es que si ellos dejan sus filas otros les ganen y ya no puedan inscribir a sus niños. Las hileras que se forman, por lo general, son para alumnos nuevos que ingresarán al curso Primero de Primaria.
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