Una propuesta de ley municipal plantea la expulsión del colegio de aquellos estudiantes que sean parte de alguna pandilla juvenil.
El parágrafo 3 del artículo 8 del proyecto de Ley Municipal de Prevención y Lucha contra la Violencia Escolar establece que “los estudiantes que integren este grupo de organizaciones (pandillas) que ejerzan hechos de violencia y agresión contra sus compañeros, serán expulsados de todo el sistema educativo fiscal por la gestión, a la sola comprobación del hecho”.
De acuerdo con el concejal y proyectista de la norma, Omar Rocha, esta propuesta normativa busca evitar la violencia escolar, que es un problema creciente en las escuelas de La Paz. Ésta, según dijo, se da por la falta de una política clara en la materia.
En esta línea, el parágrafo 1 del citado artículo prohíbe organizar pandillas u otros grupos de esta naturaleza, así como obligar a los estudiantes de un colegio a formar parte de ellos.
Después de la expulsión, en caso de que el estudiante desee retornar a su colegio, la propuesta plantea que la sanción será levantada el próximo año, previa suscripción de un compromiso de buen comportamiento por parte de sus padres.
El artículo 9 plantea que “los estudiantes que mediante redes sociales, correos electrónicos, bolgs, web, portales, sitios de difusión de videos y otros (medios) existentes en la red internet difundan y publiquen hechos de violencia y amenazas, intimidaciones y ofensas contra sus compañeros, serán sancionados con la expulsión del establecimiento”.
Al respecto, el legislador edil remarcó que ya hay mecanismos para identificar a los que suben ese tipo de materiales a la red.
En 2010 se registró un hecho que conmovió a la población boliviana, cuando se difundió un video en la red, donde se observaba que tres estudiantes de un colegio cruceño golpeaban con mucha violencia a su compañero. También se escuchaban comentarios despectivos en alusión al color de piel del alumno.
Rocha destacó que los actos de violencia y acoso escolar deben ser castigados, pero “con todos los argumentos que comprueben aquello”. Agregó que las autoridades de los establecimientos educativos deben establecer normas internas que prevengan el bullying (violencia escolar).
La norma tiene 51 capítulos y clasifica a la violencia en cuatro tipos: física (golpes de diferentes tipos), verbal (insultos), psicológica (amedrentamiento) y social (discriminación). Además, separa las sanciones de los delitos, los cuales serán juzgados bajo el Código Penal.
La propuesta
Artículo 41 Se crea el Consejo Educativo contra la violencia escolar, instancia responsable de la planificación, programación y ejecución de las políticas internas contra la violencia escolar.
Artículo 42 (Conformación) Los establecimientos escolares conformarán un Consejo Educativo de no violencia, integrado por docentes, padres de familia y estudiantes, de acuerdo a normativas internas.
Artículo 43 Las atribuciones de dicho Consejo son: cumplir y hacer cumplir la presente ley, considerar y aprobar el reglamento interno y el reglamento de sanciones, propuesto por el director del establecimiento.
Puntos de vista
Noel AGUIRRE Vic. de Educación Alternativa“Hay un principio general, éste es que desde el punto de vista educativo, los temas primero se deben encarar desde ese campo, es decir, primero educar sobre las relaciones interpersonales y los valores humanos.En las escuelas no solamente se educa y se enseña a leer y escribir, sino que se lo hace a través de las relaciones interpersonales, de la comunicación y de la atención a estos problemas.
Lo ideal es que dicha propuesta de ley municipal en primera instancia también prevea ese tipo de cosas, qué es lo que se puede hacer desde un plano educativo.
Ahora, tampoco satanicemos a las pandillas, porque a título de pandilla se puede reunir un grupo de estudiantes por cuestiones positivas. No siempre se puede pensar que los grupos de jóvenes van a ser negativos.
El hecho de hacer o ser parte de una pandilla debe ser analizado, aunque lo que tiene que ser sancionado -si es que se llega a ese extremo-, es que haya una conducta evidentemente perjudicial de parte del estudiante.
Además, en las unidades educativas ya existen reglamentos que atañen a la disciplina. En varios casos, cuando afecta al funcionamiento (del colegio) y no tiene más solución el problema, se procede a este tipo de acciones (expulsión). La ley debería analizar estos temas y compatibilizarlos, para tomar una decisión”.
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