Jhenny Verástegui, secretaria de Hacienda de la Junta Escolar, admitió el riesgo al que están expuestas alumnas y profesores al pasar clases en aulas que presentan rajaduras, pero aseguró que las estudiantes no abandonarán el edificio que les cobijó por años.
“El riesgo existe, pero nos quedaremos hasta que la Alcaldía tome la decisión de hacer la refacción”, dijo. En diciembre del 2010 se manifestó la primera alerta del deterioro del edificio, cuando un muro de un aula ubicada en la planta baja se desplomó.
La Alcaldía intervino el edificio y para precautelar la seguridad de las 650 alumnas inscritas las reubicó en ambientes de las unidades educativas Ayacucho y San Fernando. Allí pasaban clases hasta el martes, día en que padres y maestros las llevaron a retomar la vieja edificación que está a pasos de la plaza Murillo.
“Son siete meses que hemos estado fuera del establecimiento y no se ha movido una sola piedra”, afirmó Verástegui sobre el pedido que hicieron de refaccionar los ambientes.
La obra data de 1906 y fue declarada Patrimonio de la Arquitectura de La Paz. Con muros de más de un metro de espesor, el edificio presenta serios deterioros por el paso de los años y la humedad. La Razón visitó el lugar y evidenció la presencia de rajaduras en las paredes de una de las alas, que si bien no está siendo usada al momento, representa un riesgo.
La directora de la unidad educativa, Nely Mamani, indicó que son siete aulas, dos depósitos y la biblioteca las que necesitan ser reparadas. Según Mamani, se invitó a arquitectos para evaluar los daños y aseguró que el resto del edificio es sólido.
“Las dos crujías (cada una de las divisiones de la planta de un edificio) del frontis que da a la calle Ingavi y Genaro Sanjinés no corren riesgo. Las aulas del fondo son las que necesitan reconstruirse”, manifestó la directora.
PLAN. El alcalde Luis Revilla, por su parte, sostuvo que hay un proyecto a diseño final para refaccionar la infraestructura y por lo tanto “no existe ninguna razón para la movilización”.
Explicó que el plan contempla la refacción del daño estructural que sufrió el muro caído el 2010 y la refacción integral de toda la unidad educativa, lo que incluye baños y escaleras. “Esas refacciones, por lo menos, tomarán cuatro a cinco meses”, precisó. Por ello, agregó, las alumnas deberán continuar pasando clases en los ambientes dispuestos a inicios de año.
Sin embargo, Verástegui señaló que profesores y padres de familia decidieron no abandonar el establecimiento porque creen que la comuna hará cumplir la Ordenanza Municipal 076/99, que declara a ese predio Patrimonio Histórico y Cultural de la Ciudad de La Paz, y “lo convertirán en museo”.
Revilla confía en que haya un cambio de actitud. “Para hacer las refacciones tendrán que salir del edificio, no podemos trabajar cuando las niñas y maestros estén pasando clases”, dijo. El Alcalde anunció una reunión con los padres de familia para presentarles el proyecto a diseño final de refacción y resolver así el conflicto.
Edificio declarado Patrimonio
Historia
El Liceo Venezuela cumplió 105 años de servicio a la educación. Fue fundado en 1906 y su edificio declarado Patrimonio Histórico y Cultural de La Paz. Está entre las calles Ingavi y Genaro Sanjinés.
Junta Escolar dice que tiene $us 1,5 MM para refacción
La Junta Escolar del Liceo Venezuela informó que hizo gestiones ante el Gobierno central y la Embajada de Venezuela para conseguir el financiamiento que permita la refacción de siete aulas, una biblioteca, baños y dos depósitos de la vetusta edificación que presenta rajaduras.
La secretaria de Hacienda de la organización de padres de familia, Jhenny Verástegui, dijo que se trata de 1,5 millones de dólares que fueron comprometidos y que sólo restaría la autorización de la comuna paceña para proceder a la intervención.
“No necesitaremos dinero de la Alcaldía, lo que pedimos es la orden para hacer la refacción. El Gobierno y la Embajada de Venezuela han comprometido 1,5 millones de dólares”, dijo. El alcalde Luis Revilla afirmó que “el Gobierno Municipal cumplió elaborando un proyecto a diseño final”, para proceder a refaccionar el histórico edificio.
El lunes, padres de familia y profesores decidieron “tomar” el edificio del liceo y advirtieron que no desalojarán el predio. Con ese fin llevaron a las estudiantes, que hasta el martes ocupaban otros espacios, a las puertas de la vieja construcción y luego tomaron los antiguos ambientes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario