“Para cupos contactarse a este WhatsApp...”, precisaba un cartel en la puerta del colegio Piloto, de La Paz. Este mecanismo es el que encontraron algunos padres de familia para organizarse con el fin de reservar cupos de inscripción para sus hijos, pese a la prohibición vigente.
El Ministerio remarcó la prohibición de realizar largas filas por parte de los padres de familia en las puertas de los establecimientos educativos, debido a que se identificó que muchas personas realizaban un negocio ilícito con la venta de esos espacios. No obstante, ahora algunos padres de familia optaron por las redes sociales para evitar sanciones de parte de las autoridades. “El administrador de la red por WhatsApp, es un padre de familia que se está haciendo cargo de registrar a los interesados. Yo creo que es correcto que se dé preferencia a los papás que mostramos interés desde el principio, porque somos muchos que nos quedamos sin cupos desde el año pasado”, precisó Esmeralda Vargas, madre de familia.
Similar situación se apreció en el Colegio Macario Pinilla, pues una vendedora cercana al lugar informó a Cambio que se deja contactos para participar en reuniones secretas.
“Se acercan a preguntar si sé la hora exacta de la reunión, muchos padres vinieron a averiguar desde el 2 de enero”, narró la comerciante.
Según el Ministerio de Educación, son pocas las unidades educativas que registran este nivel de demanda.
Algunas de las razones responden a la ubicación céntrica de la misma, al prestigio que adquirieron algunos colegios o simplemente porque se pretende seguir una tradición familiar.
Al respecto, el Ministro de Educación aseguró que no son más de diez las unidades educativas que presentan este tipo de conflicto en las ciudades capitales.
En ese marco, Aguilar pidió a los directores de los establecimientos que se interioricen sobre este tipo de situaciones para asumir acciones. Recordó que en última instancia se debe recurrir a un sorteo para evitar las filas en los colegios.
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