Los menores del Consejo Plurinacional de Niñas, Niños y Adolescentes por los derechos humanos identifican el hecho de ir camino a la escuela como uno de los factores de riesgo más altos para sufrir violencia.
Anahí. Q. V., quien vive en un hogar, fue víctima de violencia y para ella caminar en la calle a la luz del día o de la noche, “da miedo”. “La violencia es mayor para nosotros como menores de edad, es difícil defendernos, los hombres lastiman a las niñas y las autoridades deberían meterlos a la cárcel a quienes abusan de una menor de edad”, dijo.
La menor aseguró que la violencia se desencadenó cuando ella iba camino a la escuela, por ello, aconsejó a todos los menores de edad que se encuentran en esas circunstancias denunciar y a no dejar en el silencio los hechos de maltrato, psicológico, sexual o físico.
Para Jasiel. V, las circunstancias de desatención de las autoridades policiales, judiciales, locales son un saludo a la bandera a la hora de actuar frente a los hechos de violencia que se cometen con los menores.
“Tememos ser secuestrados, que nos descuarticen para vender nuestros órganos, de camino al colegio no vemos un policía y ya en nuestro colegio la seguridad es completamente precaria y en algunos caso casi nula, es difícil ir a estudiar en esas condiciones, los mismos policías no nos ayudan, por eso queremos que escuchen nuestros pedidos”.
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