Una quincena de presidentes de juntas escolares de los macrodistritos paceños Central, Max Paredes, Periférica, zona Sur, San Antonio y Cotahuma iniciaron ayer una huelga de hambre en demanda de trabajos en las unidades educativas.
Franklin Gutiérrez, presidente de la Junta Departamental de Padres de Familia, explicó que se asumió la medida porque su sector está cansado de marchar y bloquear para ser escuchado por el alcalde Juan Del Granado, quien hace caso omiso a las peticiones.
“No queremos que haya maquillaje en los establecimientos, sino obras grandes”.
Juan Carlos Parra, director de Educación de la Alcaldía paceña, anunció que no se conversará con el sector si sigue con la medida. Informó que antes de que asumiera Del Granado había 40 colegios en alquiler y que ahora sólo hay cuatro gracias a las nuevas construcciones financiadas por el Banco Mundial con un monto de diez millones de dólares. El 65 por ciento de esos recursos fue a mejorar la infraestructura y el resto a superar la calidad educativa con cursos de nivelación para estudiantes de secundaria en el receso de invierno.
Los padres de familia están con la medida extrema en demanda de la construcción de edificios para cinco unidades educativas que están en alquiler por más de 40 años, entre ellas, Yugoslavia, Mayor Castrillo y Luis Adolfo Soliz. Además exigen mobiliario escolar para todos los establecimientos, pues denunciaron que en muchos de ellos los alumnos se sientan y escriben en tablas.
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