Pese a que en algunos casos los padres hicieron fila desde el 1 de enero, como en el Colegio Ignacio Calderón de la zona de Tembladerani, la inscripción no está asegurada pues depende de varios requisitos.
La cercanía de la vivienda del alumno a la unidad educativa es uno de los principales requisitos, además es un aspecto que el Ministerio de Educación recomendó priorizar a los directores de las escuelas al momento de la inscripción, recordó ayer el viceministro de Educación Regular, Iván Villa.
“Queremos evitar el traslado de estudiantes de zonas alejadas con el objetivo de resguardar su seguridad”, dijo Villa.
Además de la ubicación de las viviendas, los alumnos deben cumplir con la documentación requerida por el colegio para acceder a los cupos disponibles.
De acuerdo con el ministro de Educación, Roberto Aguilar, el número de cupos por aula para este 2011 es de 40 alumnos. A lo que se suma que varios colegios sólo reciben inscripciones para los primeros años, pues el resto de los cursos ya están copados por alumnos antiguos.
Por ese motivo, las filas que se vieron ayer eran para conseguir vacantes en el nivel inicial, es decir pre kínder y kínder.
Uno de los centros educativos que recibió a más de un centenar de padres fue el Jardín de Niños Carlos Bedregal, ubicado frente al Hospital Obrero.
Durante toda la mañana miembros de la Junta Escolar entregaron fichas, con el fin de evitar largas colas al momento de la inscripción, como se veía en anteriores años.
“Ni el primero ni el último está inscrito en el pre kínder, depende si cumple con los requisitos que la dirección pide”, explicó el representante de la Junta Escolar, Daniel Caballero.
Indicó que los padres que tienen fichas asistirán a una reunión el miércoles para saber si sus hijos serán recibidos o no.
La mayoría de los padres estaban conscientes de que la inscripción no es segura pero aún así recabaron sus fichas. Incluso para kínder, que hasta el momento no tiene cupos.
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