Vientos de "cambio" soplan sobre las 3.300 unidades educativas urbanas y rurales en Santa Cruz. Los niveles educativos ya no serán tres sino dos, y se llamarán "Primaria Comunitaria Vocacional” y "Comunitaria Productiva”. Los estudiantes deberán aprender tres idiomas, uno de ellos nativo, y tendrán prohibido organizar fiestas. Además ya no se graduarán como bachilleres en humanidades sino como bachilleres con orientación técnica. A esta última novedad se refiere Javier Verástegui Marañón, director departamental de los colegios Fe y Alegría, una de las instituciones de convenio con mayor experiencia en formación bajo este sistema. Lo primero que observa es que los tiempos de socialización fueron cortos, y que de las 131 unidades educativas con que cuenta la institución a nivel departamental, apenas cuatro cuentan con la infraestructura adecuada. Como en un examen sorpresa, los maestros del fiscal, también se muestran asombrados. Freddy Nava, de la Federación de Maestros Urbanos, señala que de los 14.000 maestros urbanos afiliados menos del 10% tendría capacidad para dictar materias técnicas. El resto todavía espera recibir formación por parte del Ministerio de Educación.
Implementación Para despejar dudas, Bartolomé Puma, director del Servicio Departamental de Educación (Seduca), recuerda a directores y docentes que este año se impartirá la educación técnica únicamente en el primer curso de primaria y en el primero de secundaria (que era antes segundo intermedio), y a partir de entonces, la transición se realizará de manera gradual. "Para 2014 tendremos los primeros estudiantes cursando una hora semanal de materias prácticas". Antes de eso, la formación técnica consiste en clases de "orientación vocacional" para ver cuál es el tipo de enseñanza técnica que requieren los estudiantes. A nivel departamental, existen más de 3.300 unidades educativas, entre privadas, fiscales, o de convenio, que albergan alrededor de 738.000 estudiantes. Unas 2.572 unidades son fiscales, la mitad de ellas funcionan en la capital, el resto en provincias. Consultado sobre si esa gran cantidad de estudiantes e instituciones estarían en condiciones de recibir una formación técnica, la autoridad departamental del Seduca despejó las dudas bajo otro principio tan simple como dos más dos. Las materias técnicas son variadas. Desde contabilidad, computación, contaduría, perito en banca, instalación de gas, a agricultura, soldadores, mecánica o electricidad. De acuerdo a la selección de materias por parte de los estudiantes, que para eso sirven los años previos, se determina las materias a seguir. Si el colegio donde se encuentran no tienen las condiciones para carpintería, explica Puma, entonces se recurre al centro tecnológico más cercano. "Estamos negociando con los centros tecnológicos para que funcionen solo en las mañanas, por las tardes podrían apoyar a los fiscales", dice. El Seduca no cuenta con una base de datos que determine qué colegios están en condiciones de la formación técnica y cuáles colegios no. Para eso también servirán los años de "transición". Más que eso, las autoridades de educación especulan en que en los colegios de provincias los estudiantes escogerán carreras más manuales, como agricultura, carpintería o soldadura, y en la ciudad seleccionarán carreras contables o computación. Bajo estas premisas estiman que la inversión no sea tanta como se prevé. Durante los primeros ocho años de formación académica la capacitación técnica significará una hora adicional a la semana. A partir de tercero de secundaria la formación técnica representará dos horas a la semana. En teoría, la carga horaria escolar se distribuirá de la siguiente manera: Primaria hasta segundo de secundaria 124 horas; tercero y cuarto de secundaria 136 horas; y quinto y sexto de secundaria 148 horas. Esto no por el aumento de horas para la formación técnica, sino por el resto de materias que se tiene contemplado agregar.
Capacitación e infraestructura Pero las dudas no logran disiparse. Para el delegado episcopal de educación, Franz Valdez Ribera, "no hay nada concreto", toda vez que existirían vacíos sobre la manera en que piensa implementarse la educación técnica. Las autoridades académicas de los colegios católicos no han recibido una comunicación formal sobre las cargas horarias. Ni sobre a cuánto ascendería la inversión en implementación de nuevas materias. En ese sentido el delegado considera que los montos deben ser financiados por el Gobierno. Pero antes de cualquier reforma, recordó que en la actualidad existe un importante número de colegios sin directores designados. "De esta manera se hace más difícil darle vida a una nueva educación", consideró. Por último, en lo referido a formación de docentes, consideró que quienes salen de la normal podrían cubrir materias teóricas, pero si se quiere enseñar otro tipo de actividades deberían debatir la posibilidad de contratar técnicos de otras especialidades. "Por último no vamos a debatir las leyes, pero estas normas debieron consensuarse y socializarse antes", agregó. De acuerdo al director departamental del Seduca, la formación más técnica ya comenzó a coordinarse con las normales de profesores a nivel nacional desde hace dos años atrás. Para cuando comience a aplicarse la enseñanza técnica ya habrá profesores capacitados. "No es necesario que todos los profesores tengan esta formación. Con que un profesor lo tenga por colegio, tomando en cuenta la carga horaria y el número de estudiantes, bastará para comenzar a aplicarla", dijo. Un último detalle, pero no menos ponderable, resulta suponer que la educación técnica significará un gasto adicional también para el municipio, en el consumo eléctrico, por ejemplo, en el caso de talleres con maquinaria que sea utilizada de manera regular. Omar Mejía, responsable de Educación del Gobierno Municipal de Santa Cruz, señala que los módulos que se construyen contemplan espacios para ampliar infraestructura. En cuanto al consumo eléctrico consideró que se tomará una determinación en base a la información final que establezca el Seduca.
"No se ha socializado la nueva malla curricular con los profesores, apenas un 5% del magisterio urbano asistió a las capacitaciones, hubo una falta de información”.
Saúl Lascárraga
Ejecutivo Maestros Urbanos
"Los centros tecnológicos deberán recibir a los estudiantes de colegios fiscales que no cuenten con la infraestructura adecuada".
Bartolomé Puma
Director Departamental Seduca
Punto de vista
Magdalena Cajías
Exministra de Educación
Reformas a contrarreloj
La educación técnica no es nueva. Es algo que se planteó desde la anterior reforma educativa y muchos colegios, especialmente los de convenio, llevan un tiempo aplicando algunos principios. Lo que preocupa no es su implementación, sino el tipo de enseñanza. Tiene que ser de calidad. No formación técnica incipiente, que para lo único que sirva es para formar mano de obra barata. Hay que comprender que los estudiantes que se formen tanto en el área urbana y rural, serán quienes responderán el día de mañana a las necesidades que plantee la sociedad. El temor es que las herramientas que se les den sean muy simples.
La implementación de materias técnicas le va a salir al Gobierno más caro de lo que imagina en términos de inversión. Sus características son costosas. Fíjese que una materia que parece simple como carpintería, por ejemplo, requiere una importante inversión en equipos. Más aún las materias con formación agrícolas o industriales. Deberá invertirse en maquinaria e implementar talleres.
Por otro lado, está el tema de la socialización. La formación de los docentes frente al cambio. Para materias como contaduría bien puede suplir un profesor, pero para otras materias como electricidad, o instalación de gas, tendrían que contratarse a un profesional de otra área, al menos temporalmente. Por eso considero que la transformación se está realizando a contrarreloj, porque los cambios no se hacen cuando se está a medio camino, deberían haber esperado a que los mismos docentes estuvieran listos.
La formación tecnica en los colegios
ResponderEliminaresta mal planteada porque si queremos tener una educacion tecnica es enpezar desde primero de primaria despertando sus habiliades, creatividad e imaginacion con los ejercicios de sicovisomotriz para tener buenos profesionales tecnicos.