No ayude a su hijo o hija a hacer las tareas. Y mucho menos las haga por él. No es que no deba interesarse en lo que hace, sino que los deberes escolares se han creado para fortalecer la responsabilidad y la capacidad de administrar el tiempo. “Los niños deben hacer sus tareas solos, sobre todo en sus primeros años en la escuela. La obligación de los padres es ayudarles a cumplir sus propios horarios, orientarlos cuando tenga alguna duda y controlar su desempeño final”, recomienda la pedagoga Patricia Quiroga Salazar.
LOS MUY IMPORTANTES PRIMEROS AÑOS
Los primeros años en el colegio serán la base para que adquieran buenos hábitos de estudio y aprovechen al máximo sus capacidades. Esta etapa es muy importante, pues permite forjar el sentido del orden y la valoración del tiempo.
Por ello es muy útil que el propio niño se ponga su horario de estudio. “Este horario debe ser respetado por el niño, pero sobre todo por los padres y la familia. Nunca falta la tía o el tío que quieren sacarlo a tomar helados a una hora no conveniente y los papás, por no quedar mal, ceden. Esto tira por la borda todo el respeto a los compromisos”, agrega Quiroga.
Algo que sí pueden hacer los papás es elogiar al pequeño cuando logre resultados positivos. Señales de cariño siempre son estimulantes.
En cambio, si algo ha salido mal o hubo errores, lo peor es reprender. “Muchos papás humillan a sus hijos diciéndoles ‘tonto’ o ‘inútil’, descalificándolos y mellando su autoestima. Esto genera rechazo al estudio”, explica la especialista. Lo ideal es averiguar qué ha pasado, descubrir qué es lo que no se ha comprendido y ver si requiere de algún tipo de ayuda.
“Hay que dar alternativas al niño para que por sí mismo encuentre la forma de hacer sus tareas de la forma correcta. Es importante no recurrir corriendo a maestros sustitutos o psicólogos. A veces el problema es sólo cuestión de método”.
Lo más importante: los papás deben cerciorarse de que los niños están comprendiendo. Una cosa es copiar y memorizar y otra entender realmente de qué se habla. Eso será determinante en su vida estudiantil.
Algunos consejos útiles
Horarios fijos. Incluso antes de estar en edad de ir al colegio, los chicos deben cumplir con horarios establecidos por ellos mismos para actividades obligatorias.
Tabla de tareas. Una pizarra con las actividades diarias escritas por el mismo niño o niña ayudará además al control por parte de los padres sin que sea tan evidente.
Momentos ideales. Es mejor programar las tareas tras un descanso después del almuerzo. Si se hacen inmediatamente, la digestión puede obstaculizar el trabajo y hacerlo tedioso.
Sin deberes. Cuando el pequeño no tiene deberes en el día, es importante que llene el tiempo de estudios con la lectura de algún libro o el repaso de alguna lección difícil.
Las noches. Aunque usted llegue tarde, evite por todos los medios que se hagan deberes en las noches, pues los chicos ya están cansados y no prestan atención.
Los profesores. Esté siempre en contacto con los maestros para seguir el desempeño de su hijo y para saber si es que se necesita alguna ayuda complementaria.
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