El excremento de las aves puede generar hongos o producir un peligroso polvo.
El municipio paceño inició la limpieza de nueve escuelas del centro de la ciudad en las que proliferan las palomas, cuyo excremento puede deteriorar la infraestructura escolar, que en algunos casos funciona en inmuebles patrimoniales, e incluso provocar enfermedades en los niños.
Trabajo en equipo. El responsable de Zoonosis, Héctor Mencias, informó que el propósito “es realizar una limpieza general de cada uno de estos establecimientos para evitar los parásitos que se pueden generar”.
La campaña de limpieza y fumigación inició el lunes a cargo del personal de la Subalcaldía Centro, Sabenpe, el Sistema de Regulación Municipal (Siremu) y Zoonosis, que se concentró en la Unidad Educativa República de Brasil y en el Jardín de Niños Óscar Alfaro.
Según Mencias, funcionarias de emergencias de la Subalcaldía y de Siremu fueron las encargadas de sacar el excremento y otros restos del techo de la escuela, tales como nidos, huevos, etc., primero a mano, con ayuda de algunas herramientas, y luego con agua. También taparon posibles accesos o huecos por los que acceden estas aves a los entretechos.
Posteriormente, Zoonosis se encargó de la fumigación de todo el lugar con Neolisolin para eliminar hongos, bacterias y virus, con el fin de prevenir la transmisión de enfermedades.
“Durante todo un mes se realizarán las labores de limpieza de las nueve unidades educativas, principalmente en lunes y viernes”.
les atrae la comida. El supervisor de las unidades educativas del macrodistrito Centro, Pablo Flores, informó que el incremento del número de palomas que anidan en los techos de los establecimientos educativos se debe a que estos animales hallan muchos alimentos en las aceras, patios y áreas verdes.
En cada establecimiento se encuentran hasta 150 palomas y se recoge entre 50 a 60 huevos.
José Luis Chipana, de Zoonosis, dijo que uno de los principales problemas que trae consigo la alta densidad de palomas es el volumen de su excremento, que ensucia y causa un importante deterioro en los elementos arquitectónicos pétreos y metálicos.
Una paloma adulta puede llegar a producir hasta 12 kilogramos de excremento al año y estas heces contienen importantes componentes ácidos, principalmente fosfóricos y úricos.
“Las paredes son un medio de cultivo de hongos. Cuando se secan las heces fecales de las palomas, se forma un polvillo que se propaga al medio ambiente y las personas lo aspiran al respirar. Esto puede afectar a la salud de la población”, advirtió.
Entre las enfermedades transmitidas por el excremento de las palomas se encuentran la clamidiosis, salmonelosis, crytococosis y la alveolitis alérgica, una enfermedad pulmonar de la paloma.
3 instancias municipales coordinan las labores de limpieza de los techos en las escuelas del centro de la ciudad.
Las unidades educativas que serán fumigadas por zoonosis y personal de alcaldía son nueve. Se trata de las unidades educativas España, Juana Azurduy, República de México, Luis Adolfo Siles Salinas, y los jardines de niños Sucre e Ismael Montes, la mayoría, consideradas patrimonios arquitectónicos de La Paz. Todas se hallan en el macrodistrito Centro del municipio paceño.
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