A mediados de febrero, las diez mujeres que se inscribieron en el tradicional colegio de varones Simón Bolívar, pudieron pasar su primera clase. Han transcurrido tres meses y medio desde ese entonces. Ellas admiten que a un principio tuvieron una relación muy difícil, pero que hoy pueden asegurar que los 500 bolivaristas son sus amigos.
En febrero pasado las 10 alumnas pasaron por muchas dificultades para ingresar a esta institución educativa, sufrieron agresiones, insultos tanto de padres como de alumnos del colegio, llegando a ser escoltadas por la Policía para ingresar a las aulas a pasar clases. Los estudiantes y padres de familia pedían que se respete la tradición de 99 años del colegio Bolívar de haber sido solo para varones, sin embargo el deseo de las alumnas y el apoyo de las autoridades y las instituciones de defensa de los derechos humanos, pesaron más que la tradición y las chicas lograron ingresar al colegio. Fue la mejor demostración de lucha contra la discriminación.
Hoy las alumnas lograron una integración con sus compañeros: juegan fútbol, organizan los bailes para el Día de la Madre y participan de todas las actividades programadas desde la Dirección.
Tatiana Flores una de las estudiantes de este colegio relata que luego de los primeros problemas el recibimiento en los primeros días de clases efectivas, estuvo muy bien, “la enseñanza es muy buena y los docentes nos apoyan, no es incómodo ya es normal estar con los chicos”. Considera al Bolívar como un buen colegio a nivel académico, uno de los mejores de Cochabamba y que “ha valido la pena la lucha. Los primeros días sí era un poco incómodo, pero ahora ya no, ya tenemos muchos amigos”, finaliza.
Otra de las estudiantes, Analissa Miranda afirma que sus compañeros son “muy buena gente, les tratan bien y que todo lo que pasó para que ellas puedan ingresar a esa institución educativa, valió la pena”.
Sergio Zeballos, presidente del curso dice que “el trato con sus compañeros es muy bueno, se llevan bien, las chicas ya están integradas, y la relación con ellas ha mejorado”.
La directora Elvira Beltrán cuenta que “los chicos también sufrieron las repercuciones del problema de febrero, porque ellos preferían andar por las calles sin el uniforme del colegio porque los tildaban de discriminadores, pero ahora ya pasó”.
Beltrán dijo haberse sorprendido cuando las alumnas se ausentaron una mañana a un medio de comunicación y los alumnos, no solo de su curso, sino de otros, empezaron a preguntar por ellas.
PROCESO Los procesos iniciados por la Oficina Jurídica para la Mujer contra 10 padres de familia acusados de discriminación y maltrato, siguen su curso y están en etapa de valoración de pruebas, para realizar la imputación formal a las personas que protagonizaron los hechos violentos informó la abogada Araceli Bernal.
Cien denuncias por discriminación
ZULMA CAMACHO
zcamacho@opinion.com.bo
Alrededor de cien denuncias por discriminación fueron presentadas hasta la fecha en el Viceministerio de Descolonización. La Paz es el departamento que más denuncias concentra a nivel nacional.
El jefe de la Unidad de Descolonización, Galo Illatarco, informa que son delitos sin sentencia y que tienen otra forma de enmendar el delito, por ejemplo, disculpa pública.
En Cochabamba se conocen casos hechos de discriminación relevantes, como el caso del Bolívar.
También el caso de Amalia, una joven de pollera estudiante de Derecho de la Universidad Mayor de San Simón, a quien le cambiaron su apariencia de mujer de pollera y trenzas por el de una de vestido en el mosaico de egreso.
Illatarco señala que sólo se conseguirá eliminar la discriminación, cuando los bolivianos ejerzan sus derechos conociendo la Ley 045 de Lucha Contra el Racismo y toda Forma de Discriminación.
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