Al no haber conseguido que el Ministro de Educación llegue a Sucre para tomar conocimiento de los supuestos hechos de corrupción y destituir a autoridades educativas, los maestros urbanos de Sucre decidieron organizarse para un paro de 48 horas y luego para una huelga indefinida. El Director Distrital de Educación calificó la medida de presión como política.
El paro de 24 horas, protagonizado ayer, por gran parte del magisterio urbano para exigir que el Ministerio de Educación tome acciones frente a supuestas ventas de ítems, no logró respuesta de las autoridades.
“En forma coordinada con los padres de familia, tendríamos que programar el paro de 48 horas y la huelga indefinida en tanto que el Ministro de Educación no se haga presente en esta ciudad”, informó el ejecutivo de la Federación de Maestros Urbanos, Orlando Hurtado.
En una asamblea que se realizó ayer en el colegio María Josefa Mujía, los maestros urbanos resolvieron continuar con sus movilizaciones hasta conseguir su objetivo.
“Hemos pedido que se vaya a la destitución de autoridades, autoridad departamental, subdirectores y directores, y la autoridad distrital Sucre y los técnicos de esa repartición porque ellos han sido parte de la administración ineficiente, seriamente cuestionada por el Magisterio y todo el conjunto de la población porque no han tenido un manejo transparente en la designación”, señaló Hurtado.
También se determinó exigir que los maestros iniciantes obligatoriamente vayan a provincia a sustituir a maestros que tienen años de antigüedad en su servicio.
DIRECCIÓN DISTRITAL
El director Distrital de Educación, Walter Mallo, señaló que la medida de presión tiene un afán político y recordó que el Ministerio aplicará la premisa “día trabajado, día pagado”.
“No es un paro netamente educativo, no va en beneficio de los maestros ni de los padres de familia, tengo entendido que este paro es más de tinte político, puedo afirmarlo, porque conocemos la trayectoria del Ejecutivo”, manifestó Mallo, al señalar que las nuevas autoridades educativas están realizando su trabajo con transparencia, por lo que el pedido de los maestros no tiene fundamento.
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