Tienen en común su pasión por el estudio y un alto espíritu de superación, además de un promedio que superó los 68 puntos en el colegio. Son jóvenes con sueños y ganas de triunfar en la vida, que durante años han ocupado los primeros puestos en sus colegios por sus altas calificaciones. Con frecuencia son llamados "nerds", "estudiosos" o "sabelotodos". La gente piensa que se dedican todo el tiempo a estudiar y dejan de lado otras actividades.
Ellos aseguraron que para tener un buen promedio, sólo es cuestión de organizarse y tener disciplina. Concentrarse a la hora de estudiar y ponerse horarios. Es así que se dan tiempo para realizar otras actividades y compartir con sus amistades.
Señalaron que con sacrificio, esfuerzo y dedicación todo se puede lograr en la vida.
Los jóvenes tienen la esperanza de estudiar o especializarse en el exterior y retornar al país para aportar al desarrollo y generar empleos. Indicaron que el Gobierno debería apoyar a los estudiantes para que sean formados y capacitados con un alto nivel académico.
Un caso que sorprende, es del niño Deter Foronda, que a los cuatro años de edad aprendió a leer, escribir y sacar cuentas. Actualmente estudia en el colegio San Simón y sus profesores señalan que tiene un futuro prometedor.
Algunos de ellos han participado en concursos internacionales, en los que han dejado el nombre de Bolivia en alto, como Anna Vesco, que participó en las Olimpiadas Iberoamericanas de Matemáticas en Paraguay y Stefani Coco, que fue la única que represento a Santa Cruz en las Olimpiadas Internacionales de Astronomía que se realizaron en China.
Pero también existen jóvenes que con mucho esfuerzo y apoyo de instituciones lograron traspasar las fronteras y están formándose en universidades reconocidas mundialmente como, Harvard o realizando cursos en la NASA.
Como la tarijeña, Elsa Martínez Serrano, que se ganó una beca junto a veinte jóvenes de diferentes países del mundo, para participar de una capacitación intensiva en Harvard. También está el paceño Benjamín Pinaya y la cochabambina, Daniela Etcheverry, que ganaron una beca sobre Educación Espacial Internacional en la NASA.
Disciplina y concentración
Son las dos claves para obtener buenas calificaciones en el colegio y tener éxito en los estudios, dijeron los estudiantes que ocupan los primeros puestos en su clase.
Amigas y con un promedio de 70 puntos.
Ellas son Melissa Nürnberg, Mariel Gallardo y Andrea Navas, tres jóvenes que salieron bachiller del colegio Espíritu Santo. Su gusto en común por los números y el cálculo las convirtió en amigas y en las mejores alumnas de su curso. Relataron que tener un promedio de 70 puntos en el colegio no les significó dedicarse a estudiar todo el día y pegarse a los libros como todo mundo piensa. "Nos damos tiempo para pasar otras cosas. Como pasar clases de inglés, ballet y salir con nuestras amistades. Es cuestión de organizarse y priorizar", señalaron.
Un niño con mucho talento.
Deter es un niño inquieto, sabe leer, escribir correctamente y realizar operaciones de suma, resta, multiplicación y división. Su madre desde los tres años de edad lo empezó a adentrar en el mundo de las letras y los números. Logrando que a sus 4 años domine con facilidad la lectura y escritura. Actualmente cursó el primero de primaria en el colegio San Simón de la Villa Primero de Mayo y fue el mejor alumno de su clase con un promedio de 70 puntos. Sus padres y profesores se sorprenden por su viveza y capacidad para aprender las cosas.
Amante de la física
Con 18 años, Stefani es la única cruceña que participó en las Olimpiadas Internacionales de Astronomía y Astronáutica en China. Obtuvo medalla de oro en las Olimpiadas Nacionales, medalla de plata en las Olimpiadas Latinoamericanas 2009 y medalla de bronce en el 2010.
La joven se declaró una amante de la física desde que tiene uso de razón. "Para mí la física es una forma de ver la parte intacta que quedó de la creación de Dios. Quiero estudiar astronomía aunque la carrera no existe en el país, no pierdo las esperanzas ", dijo.
Tres horas diarias se dedica a estudiar.
"Me gusta estudiar porque descubro cosas nuevas e interesantes", expresó Anna que salió bachiller del colegio Cardenal Cushing con un promedio de 68 puntos. Es una joven sencilla que se declara apasionada de los números, tanto es así que participó en las Olimpiadas Iberoamericanas de Matemáticas que se realizaron en Paraguay, donde dejó el nombre en alto de Bolivia. Relató que para ser una de las mejores alumnas de su colegio, se dedicaba diariamente tres horas a estudiar y sólo miraba televisión tres veces a la semana.
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