En el II Encuentro Plurinacional en Educación de Niñas, Niños y Adolescentes trabajadores, se evaluó ayer la forma de adaptación el currículo educativo, con la finalidad de evitar en el sector la deserción escolar.
“Es una adaptación curricular, es decir que el currículo educativo lo podamos adaptar y desarrollar en el marco del fortalecimiento de ciertas áreas o la incorporación de otras para que puedan desarrollar una actividad adecuada”, dijo.
Indicó que por ello es tan importante evaluar la situación de los niños y niñas trabajadores. Al concluir el evento, se emitirán resoluciones concretas referidas a la adaptación curricular, nuevas metodologías y la reorganización en las unidades educativas nocturnas en beneficio de ese sector.
“Lo que busca el Ministerio de Educación es que este sector tenga todos los profesores que sean necesarios pero que desarrollen clases de manera adecuada y correcta, incluso en tiempos que sean adecuados para un niño que trabaja”, agregó.
Según datos del Registro Único de Estudiantes (RUDE) alrededor 34.000 inscritos en unidades educativas trabajan lo que equivale a 1,22 por ciento del total de la población estudiantil que es 2.800.000.
La representante de los NATs (Niños, niñas, adolescentes y jóvenes trabajadores), Lizet Castro, manifestó que lo que se quiere lograr crear un programa para los maestros puedan manejar a los niños NATs y comprender y tener tolerancia con los estudiantes.
Además queremos pedirle al Ministerio de Educación que se incluya a través de una Resolución Ministerial, se incluya a los estudiantes trabajadores. “Se ha planteado la propuesta y esperemos que se pueda lograr”.
Consideró que todavía existe una brecha para la comprensión de los profesores de establecimientos educativos, “muchos no comprenden que tenemos que trabajar, sólo queremos atención y enseñanza para lograr aprender y no dejar la escuela”, concluyó.
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