6.3.16

Disciplina en el colegio

Tratar de manejar el comportamiento de los niños y jóvenes en colegio, es un tema complicado, que debe ser llevado a cabo de la mejor manera y la persona que se encuentre a cargo de este tema, debe tener experiencia con los niños y jóvenes.

La disciplina en algunos casos, se trata de controlar con castigos de toda índole, ya sean severos o no tan fuertes, algunos años atrás incluso se llegaban a castigar físicamente como golpear con la regla al estudiante, dejarlo en el sol toda la mañana, jalarle las patillas, etc.

Hoy en día estos castigos están prohibidos, porque no sólo ocasionan daños físicos al alumno, sino también van en contra de sus derechos como persona y se daña la integridad de los mismos, además que este tipo de castigos no mejora el comportamiento en la mayoría de los casos.

Todo colegio cuenta con normas, que el alumno debe llegar a cumplir y respetar si quiere formar parte de la institución, por eso es que la disciplina escolar debe seguir un código de conducta para que el alumno sepa a qué se debe atener si llegara al incumplimiento de la norma.

El colegio debe tener muy bien implementado las normas que se deben cumplir, como también las penalizaciones o sanciones por las que tiene que someterse el alumno si llega a incumplirlas, algunos colegios cuentan con una persona encargada de disciplina.

Sin embargo, otros no y lo que hacen es realizar el control los mismos profesores o se dan turnos, cual fuere el caso, para que el alumno cumpla con las normas y respete a su entorno, primero se debe lograr que se identifique con el colegio, que llegue a quererlo y respetarlo.

De esta forma será más sencillo manejar la disciplina, al contrario, cuando el estudiante no se siente identificado con su colegio, entonces resulta más complicado que trate de respetar las normas y actuará de forma rebelde e incluso en muchos casos se comportará en forma negativa, sólo por contradecir.

La disciplina está acompañada del ejemplo, es decir no servirá de nada si los profesores exigen puntualidad, cuando ellos mismos son los que no cumplen con el horario correspondiente, si el educador exige el cumplimiento de la norma, es el quien primero debe dar el ejemplo, además que una adecuada convivencia y permitir el diálogo antes de ejercer el castigo trae mejores resultados.

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