LA SOBREPOBLACIÓN estudiantil es la razón para los destrozos en colegios

Algunos establecimientos educativos albergan a 4.000 estudiantes. Esta situación refleja la calidad de educación que están recibiendo los niños y adolescentes.

LA PAZ

Cambio

Habitualmente, al finalizar cada gestión escolar, las unidades educativas terminan con significativos daños en su infraestructura, equipamiento y mobiliario. De acuerdo con el director de Educación del municipio, Álex López, una de las razones se debe a la gran población que existe en los centros educativos.

“Hay colegios que son los más reincidentes, la razón es la gran cantidad de estudiantes que tienen, y esto se debe también a la gran demanda de algunas unidades educativas respecto de otras, algunos colegios albergan hasta 4.000 estudiantes en sus aulas”, explicó López.

Efectivamente, Cambio evidenció que estas unidades son las que funcionan principalmente en tres turnos (mañana, tarde y noche), con una población de casi mil alumnos por turno, donde las paredes, puertas y ventanas rotas y pintarrajeadas con graffitis e inscripciones de todo tipo, baches en los pisos, baños y pupitres destrozados, así como el sistema eléctrico, son el común denominador de estos daños.

“Algunas veces se han encontrado incluso latas de cerveza, frascos de alcohol y toallas higiénicas en los inodoros”, apuntó López.

Pese a que se registran mayores destrozos en colegios de nivel secundario, la autoridad señaló que también en el nivel primario los más pequeños deterioran las tuberías, grifos de baños, interruptores y tomacorrientes.

Mucha benevolencia y consentimiento percibió este medio en algunos padres de familia, maestros y hasta en el portero, que con recelo intentaron justificar estas actividades al ser consultados.“Pero lo hacen en el transcurso de todo el año”, señaló un portero. “Habría que saber qué turno es el que más destroza”, dijo por su parte una madre de familia. “Pero la Alcaldía tiene que arreglar”, apuntó cómodamente un estudiante.

Reflejo de la mala educación

En esa línea, López remarcó que “el mantenimiento de la infraestructura del mobiliario y del equipamiento es un indicador de la calidad de educación que reciben nuestros niños”.

“Más allá de lo meramente académico, el hecho de que un niño cuide el pupitre que está usando todos los días es muy importante para su educación, eso es algo que nos llama la atención”, resaltó.

Por ello cobra importancia una ley municipal sobre la administración, uso y cuidado de la infraestructura, que esta Dirección trabaja para ser implementada, previa aprobación del Ejecutivo y Legislativo y el consenso con todos los sectores involucrados.

“Se destacan dos aspectos: la concientización, de manera que el cuidado de estas infraestructuras no sea producto de una presión externa, sino de una motivación interna de nuestros niños y jóvenes; y por otro lado está la sanción que correspondería, entre otros”, dijo.


Juntas escolares pueden marcar la diferencia

“Las juntas escolares son determinantes con lo que ocurre en el cuidado de la infraestructura. Hay un reflejo, una relación directa de la estructura y la sensibilidad que tiene cada una respecto del mantenimiento de su unidad educativa”, manifestó el director municipal de Educación de La Paz, Álex López.

Conformadas por padres de familia —destacó— en la actualidad éstas han cobrado una importancia como mediadores entre las necesidades y las autoridades llamadas a satisfacerlas.

“El espíritu que tienen las juntas escolares se refleja en sus unidades educativas. Hay juntas escolares a las que les interesa que haya una obra nueva; en otras el tema de la basura, por ejemplo, no lo toman en cuenta”, explicó López.