El Ministerio de Educación informó ayer que realizará una inspección a las unidades educativas fiscales al igual que a la que serán sometidos desde el lunes los establecimientos particulares de todo el país.
El ministro del área, Roberto Aguilar, comentó que no sólo los colegios particulares serán censados, sino en un corto tiempo también se procederá con una revisión en las escuelas fiscales. “Ése es otro principio que está siendo trabajado porque los municipios son los responsables de su estructura, equipamiento y dotación del material didáctico. El Ministerio hará un seguimiento a ello”, dijo.
La autoridad indicó que los municipios deben mejorar la infraestructura, instalar laboratorios y otros servicios para brindar una educación de calidad.
Aguilar destacó que en el país hay situaciones que son “innegablemente complejas. Por ejemplo, en El Alto, cada año se crean de 50 a 60 escuelas en barrios y zonas de reciente creación. Ello está articulado a que los padres de familia de alguno de esos barrios deciden crear la unidad educativa, lo hacen y después inician el proceso de acreditación e improvisan los componentes de infraestructura y, obviamente, esto va en efecto negativo a la calidad”.
Por ello, la autoridad explicó que ése es otro aspecto que se está reglamentando para que todo proceso de creación de alguna escuela responda a un sentir social, pero también a las condiciones mínimas que debe reunir una unidad educativa fiscal. “Para que no suceda que, si estamos cerrando una privada porque no cumple las funciones , en el otro espacio (es decir los fiscales) estemos permitiendo que se creen de manera improvisada unidades educativas con efecto negativo en los niños”, dijo la autoridad, que insistió en que se debe mejorar la calidad de educación en el país.
Según el informe del jefe de esa cartera, en el país hay cerca de 15.000 unidades educativas registradas y en ellas hay 2.800.000 estudiantes de todos los niveles de los sistemas público y privado.
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