Al menos seis de los nueve departamentos de Bolivia no pudieron ayer iniciar a plenitud las labores escolares debido a daños en escuelas, anegaciones de comunidades y mal estado de carreteras y vías de acceso provocados por factores climáticos.
Los servicios departamentales de Educación (Seduca) aún no terminaron de recibir reportes de todas las provincias, pero informes preliminares señalan que el perjuicio mayor lo sufrieron los departamentos de Beni y Cochabamba. En el primero las clases se postergaron en cuatro municipios hasta el 17 de febrero, y en el segundo no se pudieron iniciar actividades en al menos 25 escuelas de las provincias Chapare y Carrasco.
También hubo problemas en municipios de Santa Cruz, La Paz, Potosí y Chuquisaca. La Prensa no pudo contactar a autoridades educativas de Oruro y Pando, y sobre Tarija, Pedro Ordóñez, director del Seduca, informó que “recién en los siguientes días recibiremos reportes de las provincias. En la capital algunas escuelas no abrieron por refacciones, no por el mal tiempo”.
Precisamente en la capital chapaca, la mañana de ayer, el presidente Evo Morales inauguró el año escolar en compañía del ministro de Educación, Roberto Aguilar, y otras autoridades.
Debido al fenómeno climático de El Niño, Bolivia soporta desde mediados de diciembre un exceso de precipitaciones pluviales que provocó inundaciones, pérdida de cosechas, desbordes de ríos y deslizamientos que dejaron un saldo de 26.462 familias damnificadas, nueve decesos y dos personas desaparecidas.
A raíz de esta situación, el Gobierno declaró el viernes, a través del Decreto Supremo 417, el estado de emergencia nacional, que significa el desembolso inmediato de 180 millones de bolivianos para el rescate y ayuda prioritaria a los cinco departamentos más castigados: Beni, Chuquisaca, Cochabamba, La Paz y Santa Cruz.
Panorama
Carlos Limachi, director del Seduca de La Paz, declaró que “aún estamos revisando los reportes de los distritos, pero podemos concluir en que las clases se han iniciado con normalidad, salvo algunas excepciones como Ixiamas y Pelechuco, donde algunas escuelas no abrieron por la mala transitabilidad de vías”.
Su par potosino, Édgar Pari, reportó problemas en cinco escuelas rurales del norte de Potosí.
El diario Correo del Sur de Sucre informó que en Chuquisaca las clases no volvieron a los municipios de Icla, Presto y Mojocoya, cuyas autoridades decidieron desocupar las escuelas y habilitarlas como refugio, y a Poroma, que perdió un colegio y un internado tras el desborde de un río la pasada semana.
Santa Cruz cumplió la vuelta a los colegios en un 90 por ciento, de acuerdo con una nota de El Deber que indica que hubo suspensión en cuatro localidades del norte: Yapacaní, Santiesteban, Sara e Ichilo, por las inundaciones.
Iván Villa, director del Seduca de Cochabamba, informó a Los Tiempos que “en el trópico las clases aún no empezaron y se estudia la posibilidad de habilitar aulas en carpas”. Su oficina recibió hasta ayer reportes de que al menos 25 unidades educativas de las provincias Chapare y Carrasco que “o están aisladas por inundaciones, o los directores prefirieron ser cautos debido a la situación de las familias”.
El portal de la radio Patujú de Trinidad recoge declaraciones de la máxima autoridad educativa beniana, Humberto Pari, quien asegura que “no hay clases en cuatro de los cinco municipios más afectados por las riadas: San Ignacio, San Andrés, Loreto y San Javier, donde retrasamos la inauguración del año escolar hasta el 17 de este mes”.
El quinto con más daños es la capital, donde “a pesar de que algunas zonas están rodeadas por agua, las labores iniciaron con normalidad”.
Los departamentos más afectados son Beni y Cochabamba.
Evo inaugura la gestión en Tarija
Con el augurio de una gestión sin contratiempos como huelgas y medidas de presión del magisterio, el presidente Evo Morales
inauguró ayer la gestión educativa 2010 en la Unidad Educativa José Manuel Ávila, del barrio Eduardo Avaroa, de Tarija.
“Como la educación es tan importante —sostuvo— lo que pido a los maestros es evitar los paros, si han habido algunos errores en nuestra gestión, siento que no ha sido como antes, cuando las huelgas del magisterio desembocaban en estado de sitio y tenían razón”.
Luego, el Jefe de Estado pidió a los profesores no solamente concretarse en la enseñanza de sus materias, “sino también analizar la coyuntura política, económica y social, y enseñar a sus alumnos sobre la realidad del país”.
A su turno, el ministro de Educación, Roberto Aguilar, admitió que existen muchas debilidades en el sistema educativo fiscal, pero aseguró que durante esta gestión “serán superadas en coordinación con la dirigencia sindical del magisterio”.
Los servicios departamentales de Educación (Seduca) aún no terminaron de recibir reportes de todas las provincias, pero informes preliminares señalan que el perjuicio mayor lo sufrieron los departamentos de Beni y Cochabamba. En el primero las clases se postergaron en cuatro municipios hasta el 17 de febrero, y en el segundo no se pudieron iniciar actividades en al menos 25 escuelas de las provincias Chapare y Carrasco.
También hubo problemas en municipios de Santa Cruz, La Paz, Potosí y Chuquisaca. La Prensa no pudo contactar a autoridades educativas de Oruro y Pando, y sobre Tarija, Pedro Ordóñez, director del Seduca, informó que “recién en los siguientes días recibiremos reportes de las provincias. En la capital algunas escuelas no abrieron por refacciones, no por el mal tiempo”.
Precisamente en la capital chapaca, la mañana de ayer, el presidente Evo Morales inauguró el año escolar en compañía del ministro de Educación, Roberto Aguilar, y otras autoridades.
Debido al fenómeno climático de El Niño, Bolivia soporta desde mediados de diciembre un exceso de precipitaciones pluviales que provocó inundaciones, pérdida de cosechas, desbordes de ríos y deslizamientos que dejaron un saldo de 26.462 familias damnificadas, nueve decesos y dos personas desaparecidas.
A raíz de esta situación, el Gobierno declaró el viernes, a través del Decreto Supremo 417, el estado de emergencia nacional, que significa el desembolso inmediato de 180 millones de bolivianos para el rescate y ayuda prioritaria a los cinco departamentos más castigados: Beni, Chuquisaca, Cochabamba, La Paz y Santa Cruz.
Panorama
Carlos Limachi, director del Seduca de La Paz, declaró que “aún estamos revisando los reportes de los distritos, pero podemos concluir en que las clases se han iniciado con normalidad, salvo algunas excepciones como Ixiamas y Pelechuco, donde algunas escuelas no abrieron por la mala transitabilidad de vías”.
Su par potosino, Édgar Pari, reportó problemas en cinco escuelas rurales del norte de Potosí.
El diario Correo del Sur de Sucre informó que en Chuquisaca las clases no volvieron a los municipios de Icla, Presto y Mojocoya, cuyas autoridades decidieron desocupar las escuelas y habilitarlas como refugio, y a Poroma, que perdió un colegio y un internado tras el desborde de un río la pasada semana.
Santa Cruz cumplió la vuelta a los colegios en un 90 por ciento, de acuerdo con una nota de El Deber que indica que hubo suspensión en cuatro localidades del norte: Yapacaní, Santiesteban, Sara e Ichilo, por las inundaciones.
Iván Villa, director del Seduca de Cochabamba, informó a Los Tiempos que “en el trópico las clases aún no empezaron y se estudia la posibilidad de habilitar aulas en carpas”. Su oficina recibió hasta ayer reportes de que al menos 25 unidades educativas de las provincias Chapare y Carrasco que “o están aisladas por inundaciones, o los directores prefirieron ser cautos debido a la situación de las familias”.
El portal de la radio Patujú de Trinidad recoge declaraciones de la máxima autoridad educativa beniana, Humberto Pari, quien asegura que “no hay clases en cuatro de los cinco municipios más afectados por las riadas: San Ignacio, San Andrés, Loreto y San Javier, donde retrasamos la inauguración del año escolar hasta el 17 de este mes”.
El quinto con más daños es la capital, donde “a pesar de que algunas zonas están rodeadas por agua, las labores iniciaron con normalidad”.
Los departamentos más afectados son Beni y Cochabamba.
Evo inaugura la gestión en Tarija
Con el augurio de una gestión sin contratiempos como huelgas y medidas de presión del magisterio, el presidente Evo Morales
inauguró ayer la gestión educativa 2010 en la Unidad Educativa José Manuel Ávila, del barrio Eduardo Avaroa, de Tarija.
“Como la educación es tan importante —sostuvo— lo que pido a los maestros es evitar los paros, si han habido algunos errores en nuestra gestión, siento que no ha sido como antes, cuando las huelgas del magisterio desembocaban en estado de sitio y tenían razón”.
Luego, el Jefe de Estado pidió a los profesores no solamente concretarse en la enseñanza de sus materias, “sino también analizar la coyuntura política, económica y social, y enseñar a sus alumnos sobre la realidad del país”.
A su turno, el ministro de Educación, Roberto Aguilar, admitió que existen muchas debilidades en el sistema educativo fiscal, pero aseguró que durante esta gestión “serán superadas en coordinación con la dirigencia sindical del magisterio”.
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