3.4.20

César Camacho: “Bolivia debe dar el salto a la educación virtual como política de Estado”



La pandemia del coronavirus ha sacado a luz un cúmulo de falencias y tareas pendientes en todos los niveles del Estado. La educación es una de ellas, ya que hoy, por la medida del aislamiento, todo se ha paralizado y los estudiantes, desde primaria, pasando por secundaria, hasta la universidad, no continúan con sus aprendizajes. ¿Debiera ser así?

Todos sabemos que la educación virtual puede salvar distancias cuando hay conectividad y más aún cuando se aplica el principio de autoaprendizaje. Todo puede mejorar en beneficio de los estudiantes, cuando las situaciones límite sacan lo mejor de uno y se dan respuestas creativas.

Eso es lo que pasó en la Universidad Boliviana Quechua Casimiro Huanca, cuyo rector y docentes se plantearon que debían encontrar la manera de cumplir la cuarentena sin dejar de pasar clases, ya que tienen estudiantes en todas las comunidades campesinas a las que ofrecen una variedad de ingenierías, desde agroecología hasta agroforestería. El reto estaba planteado y fue encarada como una cuestión de vida o muerte por los docentes porque iban a quedar prácticamente cesantes.

César Augusto O. Camacho Soliz, director de posgrado de la Unibol, absolvió varias dudas de cómo fue ese proceso y comparte esa experiencia que puede ser aplicada, salvando los contextos, en otros sectores que incluso tienen plataformas educativas que pueden soportar hasta 20.000 estudiantes, pero que no se planteó en serio la posibilidad de una educación virtual cien por ciento, en situaciones como las que estamos viviendo.

-- Me gustaría que me explique qué herramientas digitales o plataforma educativa están utilizando para poder continuar con sus clases en la Universidad Quechua Casimiro Huanca.

-- Las instancias universitarias después de varios análisis de factibilidad, consumo de megas, ancho de banda, coherencia práctica y metodológica, definió el uso institucional estandarizado de las siguientes aplicaciones virtuales:

Google Classroom es la herramienta de Google para la educación. Es una plataforma que permite gestionar lo que sucede en el aula de forma online, de manera colaborativa.
Google Hangouts es una herramienta perfecta para realizar una videoconferencia en directo, programar un Hangout y poder tener una sesión de preguntas y respuestas con otros usuarios
Google Duoes, es una app de videollamadas de más alta calidad. Es simple, confiable y funciona en smartphones, tablets, Google Nest y en la web.
Formularios Google te permiten planificar eventos, enviar una encuesta, hacer preguntas a tus estudiantes o recopilar otros tipos de información de forma fácil y eficiente.
Moodle Unibol es un sistema de enseñanza diseñado para crear y gestionar espacios de aprendizaje online adaptados a las necesidades de profesores, estudiantes y administradores.
Google Earth es un programa informático que muestra un globo virtual que permite visualizar múltiple cartografía, con base en la fotografía satelital.
WhatsApp es una aplicación de mensajería para teléfonos inteligentes, en la que se envían y reciben mensajes.
Youtube es un sitio web de origen estadounidense dedicado a compartir videos online.
Google Drive es un servicio de alojamiento de archivos que permite compartir carpetas entre varios usuarios

-- ¿Bajo qué principios se conduce el aprendizaje de los estudiantes?


-- El principio fundamental es el de la gestión comunitaria de la educación, por el cual se asume este proceso como un reto fundamental que en palabras del hermano rector Hugo Guzmán Gutiérrez se busca que un proceso educativo no perjudique al estudiante en caso de reprogramar el calendario académico. Segundo, una educación acorde a la realidad socioeconómica de las familias y nuestros estudiantes; tercero, ver esto como una oportunidad para ingresar a la educación virtual y el dominio de las nuevas TIC para los futuros profesionales y docentes y, por último, que los estudiantes dominen la tecnología mediante los aprendizajes de las materias ayudando a resolver las problemáticas productivas de las comunidades indígenas, con la participación virtual del docente y el desarrollo práctico de los contenidos de las asignaturas. Cumpliendo en cada caso, todos los protocolos de bioseguridad para evitar contagios.

-- ¿Qué tuvieron que adecuar y qué estudios o sondeos tuvo que realizar Unibol rápidamente para que los estudiantes puedan acceder a la educación virtual, tomando en cuenta su conectividad y su presupuesto diario?


-- La universidad inició un diagnóstico de locación, territorialidad y conectividad que permitió conocer la localización actual del estudiante, el mapeo de sus actividades, el grado de conectividad y el presupuesto diario destinado para la compra de megas. Los resultados de este diagnóstico permitieron segmentar a la población estudiantil en tres grupos: alta conectividad, conectividad intermitente y baja o deficiente conectividad. Fue en base a este resultado que cada docente planificó actividades diferenciadas, pero a la vez articuladas a la vida misma de su comunidad para fortalecer la producción campesina con la retroalimentación. En otras palabras, la educación virtual se constituyó para la Unibol en una herramienta que permite fortalecer la producción campesina al incorporarse como la práctica productiva de los estudiantes en sus comunidades.

-- ¿Cómo esta experiencia se puede aplicar en el sistema educativo primario y secundario cuando muchos estudiantes del sistema fiscal ni siquiera tienen una computadora?

-- Primero se tiene que entender y repensar qué es la educación en contextos actuales y segundo qué entendemos por educación virtual. Cabe señalar, que el modelo de educación virtual se sostiene en los paradigmas del "aprendizaje" donde el "examen" no es parte de su repertorio, lo que si privilegia es la autoevaluación, la coevaluación y la heteroevaluación. En esto, es válido lo que señala el Ministro de Educación, al mencionar que no se debería tomar exámenes a los estudiantes en este periodo, sino más bien acompañarlos en la consolidación de este aprendizaje.

Si se parte de esta idea, el soporte virtual, se convierte en una muy buena herramienta, ya que privilegia el aprendizaje colaborativo en la pretensión de lograr aprendizajes significativos para el estudiante. En todo caso las actividades en plataforma deben estar orientadas al logro de aprendizajes autorregulado por las necesidades de los estudiantes. No se trata de usar una plataforma para " enseñar" desde la perspectiva de que sólo el docente es el que gestiona el conocimiento, sino tratar de conseguir cumplir objetivos de formación que no pasa tampoco por mandar tareas por WhatsApp, sino es ante todo generar contenidos educativos, donde lo virtual es el conducto por donde nuestros estudiantes relacionan lo que leen con lo que se vive.

-- ¿Y en las escuelas y colegios fiscales?

-- En el caso de los estudiantes del sistema fiscal, primero, antes de cualquier propuesta o plan institucional de enseñanza virtual, se debe tener muy claro la situación socioeconómica del estudiante, la localización y estado de conectividad, el presupuesto que tiene para llevar a cabo el plan virtual y también el conocimiento de TIC (Tecnologías de información de conocimiento) de nuestro personal y de ellos mismos. Un formulario diagnóstico simple, como hicimos, puede permitir recoger esos datos.

Una vez, que tenemos claro sobre que estamos trabajando, podemos ver cómo abordar un proceso de enseñanza aprendizaje acorde a la realidad educativa de nuestra institución, en el caso de la Unibol éste implicó metodologías diferenciadas según los criterios antes señalados y un proceso fuerte de capacitación docente, que ha logrado un éxito muy alto.

-- Entonces, aquí también se plantea un gran principio en formación que es el autoaprendizaje; el estudiante como copartícipe de su educación.

-- Así es. Al romper la idea clásica de la educación e introducir los componentes de autoformación y heteraformación como parte del proceso de enseñanza aprendizaje, el estudiante no está pegado las 24 horas del día en su computadora, sino que mucha tarea hace con la guía del docente, ya sea por celular o computador, pero ahí recibe retroalimentación.

-- ¿De manera más especifica ustedes como Unibol qué recomendarían a los directores y profesores para dar el salto a un modelo de educación virtual?

-- Hay seis aspectos que se deben tomar en cuenta:

1. Tener claro qué se entiende por educación virtual

2. Realizar un proceso diagnóstico de la realidad socioeconómica y conectividad de nuestros estudiantes, quizá sea el más moroso, pero se debe hacer.

3. En base a esos resultados, seleccionar un kit de herramientas educativas virtuales que cumplan los objetivos propuestos y también en el marco del presupuesto y consumo de megas.

4. Capacitar a nuestro personal y nosotros mismos en el manejo de ese kit de herramientas

5- También en base al estado de conectividad generar metodologías diferentes para nuestros estudiantes.

6. No sobresaturar a los estudiantes con tareas y trabajos que no van a poder cumplir.

-- ¿Qué debieran hacer el Gobierno, las telefónicas, los maestros y los estudiantes?

-- Actualmente, el ministro Víctor Hugo Cárdenas y su equipo tienen en sus manos un reto fundamental: dar el salto a la educación virtual como política de Estado y creo que lo está tratando de hacer, aún con las críticas de muchos profesionales del área de educación, que lastimosamente no asumen el reto. Así que consideramos que el Ministerio de Educación está asumiendo este reto.

Sin embargo, también, en este proceso de implementación del proceso de enseñanza virtual nos hemos dado cuenta como Unibol, que no basta con señalar y decir vamos a implementar un plan de educación virtual, sino que ante todo se debe trabajar y enumerar los medios que contamos. Hoy, hay un sinfín de aplicaciones, pero debemos ser conscientes de cuáles utilizar y cuánto eso implica en costo para nuestros estudiantes.

Sobre el punto anterior, el Ministerio de Obras Públicas, Bienes y Servicios debería estar apoyando en esto desde Entel como empresa estratégica, que, sin embargo, no se está haciendo, y creo que eso debería ser una llamada de atención para el ministro Iván Arias, ya que un proceso de educación virtual, muy bien pensado articulado como política educativa de Estado, puede marcar el éxito de la Bolivia que queremos en este siglo XXI.

-- ¿Y las telefónicas? ¿Podrían liberar pagos en los casos específicos de uso de plataformas educativas?

-- Las telefónicas privadas también deberían, desde el marco de la responsabilidad social empresarial, apoyar en este proceso. Ahora los maestros tienen la responsabilidad de adaptarse a este proceso de educación virtual, como parte de su papel de formadores, pero claro, para ello se necesita aportar en su formación, y ese es un reto muy grande, que se puede hacer, sí, pero debe haber un apoyo de las telefónicas y el Estado para que se pueda garantizar.

En el caso de los estudiantes, si hay un proceso, bien pensado que no los sobresature, acorde a su realidad socioeconómica y además apoyado por el Estado, yo creo que se sumarían con fuerza a este proceso, porque ellos nacieron en la era digital. Otra cosa es que, nosotros como docentes, les prohibimos hacer uso de esta potencialidad, es más hay maestros que se enorgullecen de decomisar celulares.

Por último, como Unibol nuestro papel es brindar herramientas y soluciones a la sociedad y el Estado, así que estamos dispuestos a colaborar y asesorar a quienes lo soliciten, no somos lo máximo en TIC, pero creemos, como siempre dice el hermano rector, que avanzando juntos comunitariamente nos va a dar la fortaleza para el éxito.


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