“Recibimos reclamos por los sachet de los jugos, que algunas veces no tienen bien marcada la fecha de caducidad o el contenido es menor al indicado, por eso estamos dando cumplimiento al Documento Base de Contratación en el que faculta a la Alcaldía para hacer esta supervisión permanente y sorpresiva”, informó el jefe de la Unidad de Políticas Educativas, Juan Tintaya.
La comisión edil, conformada por especialistas en control de calidad y nutricionistas, recorrió los ambientes de la fábrica, para verificar que la cadena productiva en la elaboración del néctar de frutas, cumpla con los estándares de calidad e higiene para su consumo.
“Encontramos que, desde el momento del ingreso de la materia prima, en este caso las naranjas y mandarinas, hasta el despacho de los productos hacia El Alto, se está cumpliendo con lo establecido en el contrato. Hay algunas observaciones, que también estamos haciendo para evitar algunas quejas”, dijo Tintaya en el recorrido por la fábrica.
HIGIENE
El técnico en control de calidad, José Rodríguez, aseguró que la empresa cumple con las normas de higiene en producción primaria, inocuidad alimentaria, almacenamiento y el despacho del alimento terminado.
“Están dentro de la norma, se está cumpliendo con todas las normativas vigentes, han presentado todos sus certificados y la misma infraestructura y maquinaria están en buenas condiciones, sin embargo, hemos sugerido que se mejore el sistema de fechado en los envases y se regule sus envasadoras para que cada sachet tenga los 150 mililitros establecidos”, explicó.
Asimismo, la nutricionista Shirley Rojas, afirmó que las características con las que los néctares de cítricos son procesados en esta industria aportan en el desarrollo físico e intelectual de los niños, puesto que no contienen ningún conservante ni aditivo.
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