“El diploma de bachiller se hace la entrega en el acto de promoción, estos actos van a estar programados a partir de los primeros días de diciembre”, especificó Quispe.
Cuando concluya la actividad curricular, el 30 de noviembre, comenzarán los actos de acuerdo con la planificación educativa, añadió.
TRÁMITE
A estas alturas ya culminaron con la recepción de los documentos de los bachilleres de esta gestión informó el responsable de la Unidad de Diplomas de Bachiller, Jorge Alarcón.
“Aproximadamente son alrededor de 8.500 trámites que hemos recibido”, dijo.
Los requisitos que los estudiantes presentaron son el certificado de nacimiento original, una fotocopia del carné de identidad, las libretas desde el tercero de secundaria hasta el quinto de secundaria.
“Una vez de que terminan el último examen, recién presentan la libreta de sexto curso”, agregó.
Las notas de las libretas y sus datos son cotejados con una base de datos, para que nombres y apellidos estén correctos.
“Ellos, al presentar la documentación, necesariamente tienen que presentar una declaración jurada que se (descarga) de la página web del Ministerio donde refleja el carné de identidad y todos los datos, se le entrega al estudiante y revisa para que pueda firmar y colocar la aclaración de firma”, explicó.
Con ese documento adjuntan las libretas y los requisitos.
“Revisamos uno por uno, el certificado de nacimiento, el carné de identidad y no tengan problemas a tiempo de ingresar a la universidad”, añadió.
La revisión de las libretas de tercero a quino se la efectúa materia por materia para verificar que las notas sean correctas, luego de este proceso pasa a la firma del director departamental. Si el estudiante tuviera algún problema el documento es devuelto al distrito educativo.
En estos casos, los estudiantes son notificados para poder subsanar las observaciones y continuar con su trámite.
Los datos que reciben los funcionarios son comparados con una base de datos de los estudiantes que almacena cada una de las calificaciones de los alumnos para certificar que las calificaciones de las libretas sean las mismas, explicó.
“En la base de datos tenemos todo el historial del alumno, es decir tenemos desde el primer curso hasta el sexto, todo el historial, entramos a la página del Ministerio y revisamos todas estas libretas”, dijo.
Tras este proceso de revisión, si no hay inconvenientes, se imprimen los diplomas de bachiller para que en en el acto de promoción los estudiantes cuenten con este documento que es un requisito para continuar con su formación profesional posterior. Anteriormente los diplomas eran tramitados después de que el estudiante culminó sus estudios.
Extreman medidas de seguridad
Los diplomas de bachiller son minuciosamente revisados para evitar que alguna de las calificaciones sean alteradas, explicó Alarcón.
En esta revisión detectaron casos de estudiantes que a pesar de haber reprobado presentaron sus libretas. “Se han dado casos de que evidentemente alumnos han saltado cursos o que hayan reprobado una materia y este año estén saliendo bachilleres. En esos casos, el estudiante puede presentarse al acto de promoción pero no se le entrega su diploma”, complementó.
Cuando salen bachilleres los estudiantes pueden reponer el curso reprobado, agregó.
Las medidas de seguridad del diploma de bachiller cambian año tras año para garantizar que no sean alterados, explicó.
“Cada año va aumentando más seguridad, por ejemplo, tenemos un ‘stiker’ (pegatina) el escudo con sello de agua, también tenemos un margen que va variando cada año y también varían las medidas de las letras”, argumentó. Además, tienen una serie y un número que son también cotejados en las universidades del país para comparar los datos del estudiante postulante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario