Se desconoce cómo el reptil fue a parar hasta ese lugar, aunque algunas personas suponen que el animal cayó de un vehículo que descargaba plátano, subvención alimenticia que se entrega como desayuno escolar a los estudiantes.
“La víbora estaba en la calle y suponen que podía (haber venido) en el plátano, porque rato antes había venido la camioneta a descargar. Han pensado que fue del plátano y han hecho correr el rumor que era en el desayuno escolar. No fue así.”, dijo la directora del establecimiento educativo, turno de la mañana, Rosario Ponce Veramendi.
Dijo que no se sabe la verdad cómo es que apareció cerca la puerta de la escuela y aclaró que la serpiente fue vista en el turno de la tarde, y no así en la mañana. “Yo tuve miedo y ya no quería que traigan el plátano, prácticamente no sabemos de dónde ha salido”, complementó.
Por su parte, Patricia Maldonado, propietaria de una tienda que está al lado del establecimiento educativo, dijo que la víbora se desplazaba rápidamente desde la calle hacía su tienda y se espantó.
“Estaba viniendo hacia mi tienda y empecé a gritar: ‘¡por favor ayúdenme, ayúdenme!’ está viniendo la víbora”, dijo al relatar que también la directora y la secretaria, turno de la tarde de la escuela Óscar Alfaro, estaban asustadas al ver al animal.
“No sabía si cerrar la tienda o empujar la vitrina, no sabía qué hacer. Luego vinieron dos jóvenes del frente porque me escucharon gritar”, aseveró visiblemente impactada.
“Los jóvenes vinieron con su escoba y le dieron tres golpes, y no murió y en el cuarto golpe recién se quedó quieta. La serpiente era de un metro y medio”, concluyó.
Al enterarse del escándalo y pavor que causó la serpiente, dos funcionarios de la supervisión del desayuno escolar se hicieron presentes en el lugar. “Los vecinos dicen que la víbora han encontrado en la calle, en ningún momento ha entrado al establecimiento en las bananas, cosa que no ha sido así. Estamos sorprendidos al ver (a la víbora), es grande, es grande”, afirmó la supervisora, Marina Quispe.
“Nos han dicho que hay bichitos pequeñitos”, dijo Genaro Mamani, supervisor, al descartar sobre arañas y tarántulas.
Punto de vista
“ Yo tuve miedo y ya no quería que traigan el plátano, no sabemos de dónde ha salido (la víbora)".
ROSARIO PONCE / DIRECTORA DE LA ESCUELA
“ Estaba viniendo hacia mi tienda y empecé a gritar: ‘¡por favor ayúdenme, ayúdenme!’ está viniendo la víbora".
PATRICIA MALDONADO / DUEÑA DE LA TIENDA
“ En ningún momento ha entrado (la víbora) al establecimiento en las bananas (que dejaron)".
MARINA QUISPE / SUPERVISORA DEL DESAYUNO
“ Nos han dicho que hay bichitos pequeñitos (en las bananas, pero no arañas y tarántulas”.
GENARO MAMANI / SUPERVISOR DEL DESAYUNO
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