Henry Alcón, oficial Mayor de Desarrollo Humano de la Alcaldía alteña, señaló que se ha destinado alrededor de 19 supervisores, distribuidos en los diferentes distritos para efectivizar con mayor fuerza el control de productos.
“Estamos trabajando con los supervisores en cada una de las unidades educativas, la función de estos supervisores es controlar la parte cualitativa y cuantitativa de las raciones del desayuno escolar. En la parte central tenemos 13 supervisores en diferentes distritos, dos fiscales y también contamos con supervisores en las subalcaldias que llegan a un de número de 19”, remarcó Alcón.
De acuerdo con el contrato suscrito con las empresas distribuidoras del Alimento Complementario en la ciudad de El Alto, si existiera incumplimiento a una de las cláusulas tanto en la distribución, calidad y cantidad serian pasibles a sanciones pecuniarias.
“Dentro el contrato que se ha firmado con las distintas empresas es que tiene que tener sello Ibnorca, para que cumpla con la calidad ISO y garantizar su producto como alimentación. Por lo que el incumplimiento a una de las cláusulas dará paso a una sanción económica del 7 por ciento del total de la distribución de un día y si persiste la mala distribución pasando el 15 por ciento se podría rescindir el contrato”, argumentó la autoridad municipal.
Cabe recordar que el Alimento Complementario Escolar se distribuye a más de 261 mil estudiantes de nivel inicial, primario y secundario que consiste en lácteos, frutas y sólidos. El presupuesto destinado es de 63 millones de bolivianos para la gestión 2013.
El objetivo del Programa de Alimentación Complementaria, más conocida como “desayuno escolar”, es proporcionar alimentos con valor nutritivo para los estudiantes.
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