Aguilar argumentó que si a ese monto se le suma además el presupuesto destinado a universidades públicas y a otras instituciones educativas que tienen carácter autónomo descentralizado, “estamos hablando de 11.000 millones de bolivianos que tienen a educación como destino”.
“Ahora que las direcciones departamentales han retornado al ámbito de la dependencia del Ministerio de Educación, las cifras ya han sido objetivamente puestas y son 6.000 millones (de bolivianos), aproximadamente, de recursos destinados a educación en Bolivia”, explicó la autoridad a la agencia gubernamental ABI.
Aclaró que en alguna oportunidad hubo la confusión de que el Ejecutivo invertía más en los ministerios de Defensa y de Gobierno, que en la cartera que actualmente está bajo su cargo.
Las cifras, dijo el ministro, muestran, sin embargo, que Educación dispone de cuatro o cinco veces más de recursos económicos que las citadas carteras de Estado.
Aguilar señaló que esa confusión se presentó porque las direcciones departamentales de educación dependían de las prefectura, actuales gobernaciones, por lo que el presupuesto destinado al pago de sueldos de maestros no aparecía en planillas del Ministerio de Educación, sino en el presupuesto de las citadas instancias de gobierno departamental.
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