La sanción fue fijada por la autoridad inmediata superior de los maestros. “Los directores emitieron los memorándumes de llamada de atención severas que quedan en el archivo personal de cada docente”, dijo el director departamental de Educación, Jorge Ponce.
Los padres de familia hicieron las denuncias correspondientes y ocho de ellas fueron remitidas directamente al Ministerio de Educación. En el proceso de investigación se pudo establecer que algunos casos fueron magnificados por los padres de familia.
“Hemos comprobado, que las denuncias no eran evidentes sino magnificadas por los padres”, dijo Ponce a tiempo de explicar que habían denuncias de tareas de 50 y 100 ejercicios, cuando en realidad sólo eran 15; y otros casos donde por falta de tiempo el maestro no alcanzó a revisar las prácticas y los estudiantes seguían realizando en sus vacaciones. El pasado año no se reportó ninguna denuncia.
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