La decisión surge tras una reunión realizada ayer en la que se determinó por unanimidad que las autoridades expliquen lo sucedido, ya que se habría atentado contra la honorabilidad del colegio, explicó el director, Delfín Colque.
El pronunciamiento será remitido a la Dirección Departamental de Educación, la Distrital, a las autoridades del municipio y al concejo municipal de Quillacollo.
El director desmintió que algún trabajador del colegio haya estado presente en la actividad posterior a la entrega oficial del establecimiento por el presidente Evo Morales.
Contó que después del acto, prepararon un almuerzo para Morales, pero que por sus compromisos se fue. “Sólo se quedaron 120 personas entre autoridades educativas a nivel departamental, personal del municipio, el Concejo en pleno y exdirectores, pero todos nos retiramos de la infraestructura al promediar las 14:00”, afirmó Colque.
Por otro lado, aclaró que las autoridades municipales deben explicar quién dio la autorización para el consumo de bebidas alcohólicas en el colegio. Deslindó cualquier responsabilidad, ya que la unidad educativa será entregada de manera oficial al director recién este martes.
“Yo hablé con el Charles Becerra y le dije que antes de recibir vamos a verificar toda la infraestructura, si tiene o no todo lo que estaba comprometido”, aseguró Colque. Contó que dejó a las autoridades reunidas, sin conocer que consumirían bebidas alcohólicas.
El director aclaró que si en un plazo de 24 horas no se recibe respuesta de parte de la Alcaldía de Quillacollo, se llamará a una asamblea general que determine movilizaciones, como una marcha, a partir del miércoles.
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