Waldo Tarifa, director de la Defensoría de la Niñez, indicó que en promedio reciben entre dos a tres cartas diarias, de directores de unidades educativas, haciendo conocer hechos de violencia que se presentan en escuelas y colegios.
“Llama la atención la conducta agresiva de algunos estudiantes, que en su mayoría están incurriendo no solamente en bullyng, sino también en la comisión de ilícitos, en este caso lesiones”, señaló.
En el caso concreto del hecho ocurrido en el colegio Campero, con la agresión de la estudiante que le quito un pedazo de la oreja a otra, señaló que más allá de la intervención con la orientación a la agresora y la víctima, se presentó una denuncia ante la Fiscalía, para que sea esa instancia la que investigue el hecho.
Señaló que hasta la fecha, desde el inicio de las labores educativas, la Defensoría registró 12 denuncias, que van desde agresiones verbales que son las mínimas, hasta agresiones físicas.
“En mi despacho llegan las cartas a diario de los profesores de unidades educativas para que nosotros podamos ir para dar orientación. Van desde denuncias mínimas de agresiones verbales, hasta las físicas, por lo menos estamos hablando de dos cartas a diario por unidad educativa”, señaló.
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