Al respecto, la componente de la Sociedad de Estudios Históricos y Patrimonio Cultural (Sehpac), Ruth Chaparro, informó que es de esta manera que Oruro se queda con menos patrimonio arquitectónico porque la construcción del edificio de los kínderes "Rodolfo Soria Galvarro" y 12 de Abril, está considerada como un solo edificio con lo que era la escuela Murguía que funciona actualmente como un museo dependiente del Municipio.
"Entiendo que en el catálogo se encuentra como Escuela Murguía pero no se encuentra como kínder porque es todo el conjunto de la edificación que está reconocido como edificación patrimonial", explicó Chaparro.
A partir de la catalogación, los edificios patrimoniales se encuentran protegidos por el Estado y por ende por el municipio como parte de su competencia establecida en la Ley 2028 de Municipalidades.
En el artículo 17 de la mencionada ley, los municipios deben hacer preservar los bienes patrimoniales arqueológicos, precolombinos, virreinales, republicanos, históricos de la nación o los procedentes del culto religioso que se encuentren en su jurisdicción sean públicos o privados, promover su uso y goce lucrativo y restaurar los que sean de propiedad pública municipal.
Si se llega a constatar este hecho, según Ruth Chaparro, se puede sugerir e incluso exigir que el proyecto se vuelva a ejecutar o reformular en la parte de restauración como una obligación de todas las instituciones y de los mismos orureños de proteger el patrimonio de Oruro.
Por su parte, el presidente del Comité de Etnografía y Folklore, Maurice Cazorla, dijo que al conocer de la probabilidad de destruir la infraestructura dialogó con la directora de la unidad educativa sin haber conseguido ningún resultado aunque se advirtió que por ejemplo el Museo Histórico del Municipio debía ser ampliado al Kínder Soria Galvarro para tener un repositorio amplio, proyecto que no se realizó hasta el momento y que de un día al otro se vio la edificación destruida.
"Estamos perdiendo un patrimonio importante porque la edificación data de finales del siglo XIX y esto nos demuestra que queremos olvidarnos de la historia y de nuestro pasado dejando de lado nuestro patrimonio que es otro síntoma de la ignorancia que tenemos en cuanto a los procesos culturales", manifestó Cazorla.
Por su parte, la oficial mayor de Desarrollo Humano del GAMO, María del Rosario Cortez Gonzales, informó que desconocía ese aspecto patrimonial y que pediría un informe para conocer detalles de si se tomó en cuenta que la infraestructura se trataba de un edificio patrimonial el momento de elaborar el proyecto de la nueva edificación.
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