La directora de la Asociación de Voces Vitales, Karen Flores, en el programa En Directo de la Red Erbol, informó que según los datos obtenidos es preocupante el crecimiento del fenómeno.
“Hemos hecho el primer diagnóstico nacional sobre acoso y violencia escolar (donde el) 50 por ciento de los estudiantes está involucrado en el acoso escolar ya sean como víctimas, agresores o mirones (…) donde también están incluidos algunos docentes que prefieren hacerse de la vista gorda”, afirmó.
Los “matones” (niños o niñas abusadoras) existen desde el kínder, el niño que se fija en sus similares y probablemente por sobreprotección atropella a sus compañeros que el mismo debe ser informado a un adulto o las personas responsables de un curso o de la unidad educativa, agregó.
Además, siete de cada 10 niños dicen haber sufrido violencia por parte de sus docentes, ya sea verbal, física y hasta a veces sexual; y “lo triste es que (sólo) uno de cada 10 chicos le contaría a sus padres que son víctimas de violencia y acoso escolar y nueve no le diría sino es a un compañero porque no existe lazos de confianza”, sostuvo.
La especialista explicó que muchos padres y madres no se preocupan y menos dan tiempo para escuchar la situación o la vivencia escolar o colegial de sus hijos sino que tratan como a una pertenencia.
En Bolivia se puede advertir varios videos en sitios de Internet donde niñas en estado de ebriedad son burladas y abusadas; por tanto, Flores recomendó a los padres a tener comunicación muy amigable con los hijos e hijas.
Además, indicó que es bueno abordar los problemas a tiempo posterior a una agresión en un partido de fútbol o pelea entre chicas, por algún incidente, porque los “conflictos son sanos” siempre que se reconozcan los errores.
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