Este año debían jubilarse alrededor de 4.000 maestros a fin de dar paso a los profesionales egresados de las normales que demandan un ítem en el magisterio. Los desempleados suman 12.000 y, de cumplirse la previsión del Gobierno, el 2012 se podría contar con 8.000, 4.000 generados por la jubilación y otros 4.000 de nueva creación.
Nenrry Vázquez, pedagoga y catedrática universitaria, expresó el “respeto” que tiene a los años de experiencia y la sabiduría de los profesores con más de 60 años de edad, pero consideró que “ya no corresponde” que continúen impartiendo clases.
“No es pertinente que un profesor de 65 ó 70 años tenga a su cargo la enseñanza de niños o jóvenes, menos aún que continúe dando clases. El hecho de ser niño demanda (del maestro) otras actividades, inclusive físicas”.
La pedagoga consideró que a esa edad (60, 65 ó 70 años), los profesores deberían dedicarse a diseñar propuestas y proyectos para mejorar la calidad de la educación en el país.
Para su colega Felipe Gamarra, el principal problema es la brecha generacional entre “los viejos profesores” y sus alumnos. “En pedagogía, un principio básico es la igualad generacional. Maestros y alumnos deben estar en el mismo ritmo e incluso hablar un mismo lenguaje en materia de tecnología e información”, afirmó. Los profesionales coincidieron en que es difícil para los adultos mayores adaptarse al uso de nuevas tecnologías (redes sociales, internet, data show y otros) y a nuevas metodologías pedagógicas.
El director departamental de Educación de La Paz, Sebastián Gutiérrez, advirtió que los maestros de 65 años deben jubilarse, “porque ya no hay la calidad educativa” que se espera, precisamente por la brecha generacional. El secretario ejecutivo de la Confederación de Maestros Urbanos, Jorge Baldiviezo, explicó que muchos maestros no quieren jubilarse por los bajos montos de rentas que percibirían.
Cartas de jubilación
En La Paz, las direcciones distritales entregaron cartas “invitando” a jubilarse a los maestros que están en edad de hacerlo (según la ley desde 58 años).
Dirigencia admite que hay debilidades
La dirigencia del magisterio admite que la falta de capacitación y el desconocimiento de nuevas tecnologías son dos problemas recurrentes entre los profesores con más de 60 años de edad que aún ejercen.
“Es evidente que hay una diferencia. Los profesores mayores de 60 años están desactualizados”, dijo el ejecutivo de la Confederación de Trabajadores de la Educación Urbana de Bolivia (CTEUB), Jorge Baldiviezo, quien sin embargo reflexionó sobre los problemas que tienen los docentes en edad de jubilarse para pasar al servicio pasivo, y citó la burocracia en los trámites y la magra renta que recibirían.
Baldiviezo dijo que, en efecto, un maestro con 65 años no tiene la capacidad de uno de 25, de “adaptarse” al uso del internet y otras exigencias de la modernidad en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Opinan cuatro educadores
‘Deben dar paso a los más jóvenes’
Mario Mamani (28). Titulado
“Soy maestro titulado de la Normal Simón Bolívar. Estoy esperando a que los colegas mayores de 60 años se jubilen para optar a un ítem. Creo que los profesores que cumplieron su ciclo deberían jubilarse para dar paso a los nuevos maestros titulados”.
‘Pedagógicamente es perjudicial’
Grover Alaru (25). Egresado
“Considero que pedagógicamente no está bien que los profesores que han superado los 60 años de edad continúen dando clases. Además, ahora la enseñanza debe ser dinámica y acorde a los nuevos desafíos que ofrecen las nuevas tecnologías”.
‘No se interesan en actualizarse’
Luisa Apaza (47). Maestra
“En la unidad educativa donde trabajo hay muchos colegas que ya sobrepasaron los 60 años de edad que deberían jubilarse. Lo grave es que, en su caso, estos colegas no se actualizan y eso incide en el nivel de la calidad educativa de los alumnos”.
‘Incide en la baja calidad educativa’
René González (46). Director
“La principal razón para que muchos maestros no se jubilen es la burocracia de los trámites. Pero considero que los maestros con 60, 65 e incluso 70 años deberían jubilarse, porque es un perjuicio pedagógico que incluso incide en la baja calidad educativa”.
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