Cansados de la actitud asumida por los maestros que continúan con sus medidas de presión, padres de familia intentaron tomar ayer la Sede Social del Maestro, situada en la calle Genaro Sanjinés e Ingavi, lo que generó una reacción violenta de los profesores que se enfrentaron contra este sector que busca levantar la medida en demanda del incremento salarial del 12 por ciento.
Los disturbios que se registraron entre padres de familia y maestros urbanos, que se movilizaron por las principales calles de La Paz, dejaron al menos tres personas golpeadas después de un enfrentamiento con piedras, palos y petardos en el centro de la ciudad de La Paz.
Dos maestros y un padre de familia sufrieron las consecuencias de los golpes en inmediaciones de la sede sindical de los profesores de La Paz.
En tanto, el presidente de las juntas escolares del macrodistrito Sur, Rodrigo Quisberth, manifestó que los padres de familia “están cansados” de las medidas de presión del magisterio porque perjudican a la población estudiantil.
“Cada año nuestros niños y niñas se ven imposibilitados de pasar clases a causa de los caprichos del magisterio urbano”, denunció.
Aseguró que con esa movilización se inició la “lucha” de los padres de familia para que el Gobierno convoque a un referendo con el objetivo de declarar profesión libre al magisterio.
“De no solucionarse ese problema tomaremos las unidades educativas con aquellos profesores que tienen vocación de trabajo y profesionales que quieran dictar clases”, sostuvo el presidente nacional de la Junta de Padres de Familia, Franklin Gutiérrez.
Acusaron a los maestros de gozar de muchos privilegios en comparación a la situación de cada uno de ellos, pusieron de ejemplo las vacaciones de casi 3 meses que tiene este sector laboral, seguro médico y demás beneficios sociales, aparte de los bonos que perciben, además de trabajar pocas horas en el día, les exigieron tener más conciencia en este sentido y ver la realidad de estas familias.
“La señora Vilma Plata no tiene hijos, es por eso que no siente lo que pasamos nosotras las madres de familia al ver cómo pierden días de clases y pasan el tiempo sin hacer nada de provecho, ya no podemos seguir soportando esta situación,” indicó acongojada, Juana Quispe Limachi.
Los padres de familia exigen que el Gobierno decrete profesión libre, un examen genuino a todos los maestros para medir sus capacidades y que en caso de que los docentes no acudan al diálogo convocado por el Gobierno para negociar soluciones, se adelante las vacaciones invernales, con el fin de escarmentar al magisterio.
Los padres de familia, convocaron a sus bases a asistir a una movilización masiva para hoy. La concentración se efectuará a partir de las 8:30 horas desde la ciudad de El Alto, con el fin de frenar la medida de presión que perjudica a la educación y sociedad en general.
El paro indefinido de los maestros urbanos va en contra de la Constitución Política del Estado en su artículo 17, además del artículo 21 en su inciso 7.
MAESTROS
El secretario ejecutivo de la Federación del Magisterio Urbano, José Luis Álvarez, acusó al Gobierno y al diputado Juan Choquetarqui de organizar a los padres de familia contra el magisterio.
“El ministro Aguilar miente porque no nos convocó al dialogar desde el domingo, lunes y martes. Y ahora a esperado que haya enfrentamientos entre padres de familia y maestros. Esa es la política del Gobierno, esa es la política hipócrita del MAS de hacer pelear entre pobres para pretender imponer y continuar aplicando su política neoliberal de destruir a las familias a través de sueldos de hambre”, dijo.
Anunció que los maestros volverán a paralizar el tráfico vehicular a las 15:00 en la Sede de Gobierno y que las movilizaciones continuarán inalterables en demanda de un salario justo.
Por su parte, el Ministerio de Educación reiteró la invitación a los dirigentes de las federaciones de maestros urbanos del país para resolver las demandas de ese sector en una mesa de diálogo y no con protestas que perjudican a los estudiantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario