¿Inquietos o hiperactivos?

La hiperactividad es un problema que se escucha de forma recurrente en los colegios y que puede afectar en la educación de los niños; sin embargo, es importante diferenciar esta conducta de la falta de atención o de problemas sociales que puedan estar afrontando los pequeños. Es importante aprender a identificar a un niño hiperactivo.

NO ETIQUETE A LOS NIÑOS. Pareciera que los últimos años el tema de la hiperactividad en los niños se hubiese incrementado; sin embargo, a veces ocurre que los profesores o padres de familia etiquetan como "hiperactivos" a menores que tienen problemas de atención porque atraviesan por conflictos familiares o tienen algún problema de atención. "A veces quieren expresar algo a través de sus conductas, no todos son hiperactivos", destacó Fabiana Burgos, neuropediatra.

Esa etiqueta de "hiperactivos" puede afectar enormemente a los niños. Pueden llegar a ser rechazados por otros menores, lo que les genera frustración y a la larga esto puede requerir ayuda psiquiátrica por problemas de depresión. "Son niños con inteligencia normal, solo que son más espontáneos. No son así porque quieren y necesitan mucho cariño", indicó

AFECTA EN LA EDUCACIÓN. Uno de los principales problemas por el que atraviesan los niños hiperactivos es en las aulas, donde se refleja un bajo rendimiento escolar.

Estos niños son inquietos, nunca terminan de copiar la tarea porque se van a charlar con otros compañeros, no paran de conversar y sus cuadernos son desorganizados y en algunos casos comienzan a escribir de arriba a abajo.

Por todo ello, es muy importante que los maestros y profesores tengan estrategias para manejar el comportamiento de estos niños, por ello es importante el trabajo coordinado con un equipo multidisciplinario que incluye a neuropediatras y psicopedagogos.

MUCHA EDUCACIÓN FÍSICA. Otro de los aportes que pueden realizar el colegio y los padres es incentivar la educación física y los deportes en los niños para que puedan canalizar esas energías extras que poseen. "Hay que incentivarlo. Cuando a un niño le gusta algo se dedica con todas sus ganas", indicó Burgos.

LA AYUDA DE LA FAMILIA. Sin duda que la familia es muy importante para ayudar a estos niños porque es en el hogar donde primero se identifica las características de hiperactividad.

Uno de los aspectos clave es que desde que se despiertan están corriendo por la casa, a la hora de comer no terminan y ya comienzan con otra actividad. En resumen, no puede realizar una actividad de principio a fin sin interrupciones.

Para la doctora Burgos, uno de los aspectos clave para identificarlos es que "no hay niño hiperactivo en el colegio y luego en casa es normal, ahí existiría otro problema", explicó.

Es importante también que los padres de familia y profesores establezcan normas muy claras que los niños deben cumplir.

METODOLOGÍA

Son inteligentes como cualquier niño, pero necesitan más atención.