La Feria Educativa, realizada el pasa-do 1 de diciembre en la Plaza Villarroel de la ciudad de La Paz, tuvo la oportunidad de mostrar las actividades realizadas por maestras y maestros de las diferentes provincias del Departamento de La Paz, en sus Unidades Educativas en el marco de la aplicación del nuevo modelo educativo socio comunitario productivo, mostrando de esta manera las vocaciones productivas de cada región.
Los campos de mayor aplicación fueron la cerámica, alfarería, alimentos naturales como la quinua, amaranto, maíz, producción lechera y sus derivados.
Estuvieron presentes maestros originarios las diferentes provincias del Departamento, entre ellos los de la comunidad “lecos” de la Provincia Larecaja, mostrando su atuendo típico y sus danzas.
Lo propio maestros del sector de Charazani, Titicachi, norte de La Paz, quienes mostraron habilidades para elaborar objetos de cerámica utilizando diversidad de técnicas y para diferentes objetos de arcilla con varias aplicaciones.
Maestros trilingües (castellano, aymara y quechua) de la cultura “mollo”, mostraron sus habilidaes para la confección de prendas originales, con vistosos colores, donde utilizaron lana de oveja, alpaca, llama y vicuña, colores teñidos con extractos naturales como el molle, la queñhua, kiswara y una variedad de ingredientes naturales, conocimientos que perduraron por el tiempo.
Una característica principal es que todos estos elementos sirvieron para la elaboración de planes de clase, que bajo el nuevo modelo educativo, se parte de un objetivo holísitico, con caracerísticas que muestran cuatro dimensiones; el ser, saber, hacer y decidir, en todos ellos el maestro y maestra se incluye en todas las tareas, como tambien interviene la comunidad. El desarrollo de la lección aplica una metodología que parte de la práctica, esta a su vez es extraída de la experiencia y realidad de cada región o contexto. Este proceso práctico permite construir la teoría, sustentada en la sabiduría de nuestros ancestros complementada con el conocimiento científico, llegando a valorar dicho conocimiento para luego fomentar la producción que puede expresarse de dos maneras; producción material o tangible y producción intangible o intelectual.
El género no puede excluirse en este proceso, así como las tareas no son específicas sino que son compartidas tanto para la mujer como el varón.
Una interesante propuesta es la que ha-cen maestras y maestros de la Comunidad de Combaya, quienes proponen la producción de derivados del maíz, para trabajar con los Municipios y dotar del desayuno escolar con alimentos de altísimo valor nutritivo. Ellos muestran a niños totalmente sanos y libres de caries dental, debido al consumo de alimentos producidos orgánicamente, libres de agentes químicos.
Finalmente, los diferentes grupos de maestros compartieron un clásico “apthapi” comunitario.
Por: Lic. Samuel Mamani Maquera
DIRECTOR ACADEMICO ESFMTHEA EL ALTO.
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