l diálogo y la información transparente entre padres de familia y directores fueron señalados como las claves para eliminar las largas filas para inscripciones en las unidades educativas.
Jorge Ponce, director de la Dirección Departamental de Educación recomendó tanto a los padres como a responsables de las unidades educativas dialogar para evitar las largas filas, que suelen verse en esta época del año.
La recomendación nació a raíz de lo ocurrido en la Unidad Educativa Juan Crisóstomo Carrillo, donde padres realizaron largas filas e incluso durmieron en puertas del establecimiento aguardando por una plaza para inscribir a sus hijos.
Según Ponce “el director distrital y el director de la unidad educativa deben reunirse con los padres de familia y explicarles cuántas plazas disponibles existen”, para no albergar falsas expectativas explicó.
Dijo también que del número disponible en cada curso paralelo, que no debe pasar de los 35 alumnos, existe ya una plaza determinada en cada unidad que ya está reservada para los hemanos menores de alumnos de cursos superiores. Y que en este marco únicamente se dispone de la diferencia entre ambas cantidades.
“Hay que otorgarles seguridad ciudadana y seguridad familiar. El padre de familia no puede pasarse toda la mañana repartiendo a sus hijos. Si ya tienen hermanos mayores en la unidad, los menores tienen derecho”, explicó.
Recomendó que una vez que se tenga el número definido de plazas libres, los padres y los directores deben verificar las solicitudes para evitar que los cupos los reserven inescrupulosos que realizan filas únicamente para venderlas después.
“Deben saber e informar qué cupo existe en cada unidad y los padres deben adecuarse a este número, dijo Ponce”.
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