Malas notas amargan la vida de los estudiantes, dentro y fuera del colegio. Es así que las relaciones familiares se deterioran y las peleas resultantes nos pueden arruinar la semana a papás e hijos. Para evitar eso, la psicopedagoga Patricia Ruiz, profesora del instituto ESEC Bolivia, ofrece cinco consejos para evitar que este año que recién comienza se convierta en una pesadilla escolar.
1 Establecer confianza entre padres e hijos es esencial para trabajar en los problemas. Una manera de lograr esto es el evitar frases como “te lo dije” o el culparlo inmediatamente de las malas notas. El niño debe saber que como padres le ayudaremos con los problemas en el colegio. De esta manera se detectará cuáles son las áreas débiles del alumno.
2 Los maestros deben ser los aliados de los padres. Debe existir comunicación con los educadores. Ellos informarán de los problemas que enfrenta el niño y recomendarán posibles soluciones. Tanto papás como profesores deben evaluar constantemente la vida escolar del alumno.
3 Los padres deben darse tiempo para ayudar al niño en sus estudios. No deben dejar que la educación sólo sea tarea del maestro. Es conveniente trabajar con los hijos en sus tareas. No sólo permite que el niño vea en sus progenitores una figura de apoyo, sino que también ayuda a verificar el avance del alumno y sus falencias en el estudio.
4 Hay que conocer los intereses del niño. Muchas veces los padres quieren que los hijos sigan sus pasos o compartan sus gustos. Eso no es posible, el niño es una persona autónoma y, por lo tanto, tiene sus propios talentos y habilidades. Conocer qué es lo que más le gusta y potenciarlo, permitirá que el niño también acepte trabajar en la materia que tiene problemas.
5 Hay que reconocer sus logros más que cuestionar sus fracasos. De esta forma se estimula el desempeño escolar. Se puede premiar al niño por su buen trabajo. Esto no significa alabar ni galardonar el mero hecho que cumpla con su deber, menos sobornarlo. Esto es demostrar que, si trabaja duramente, puede obtener una recompensa.
Mejor atención
Asegúrate de que tu niño estudie sin distracciones. No debe tener un televisor cerca encendido, a menos que esa sea la tarea, ni nada que pueda distraer su atención. Habilita un espacio dedicado exclusivamente al estudio y la lectura.
Lectura rápida
La Editora Sudamericana de Extensión Cultural (ESEC) ofrece el sistema de Lectura Inteligente que permite al estudiante leer 2.000 palabras por minuto reteniendo el 100% de la información. En un curso de seis meses el alumno mejorará su desempeño escolar con asesoramiento personalizado.
Postura ideal
Debes enseñarle a tu niño a estudiar en buena posición. Cuida que tu pequeño sepa sentarse con la espalda erguida y en un ambiente iluminado adecuadamente. Debes evitar que lea en la cama ya que, al final, no asimilará el contenido de sus libros de colegio.
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