La directora distrital de Educación de Trinidad, Cecibel Padilla, informó ayer que la crecida de las aguas de los ríos Ibare y Mamoré afectó el normal desenvolvimiento de las labores educativas porque algunas escuelas quedaron inundadas.
“La situación es grave porque las unidades educativas están dentro del agua, en Puerto Ballivián ni siquiera se estrenó, se improvisaron espacios para que los alumnos pasen clases, los maestros están presentes en sus horarios de trabajo”, dijo la autoridad educativa.
A lo anterior se suman las unidades educativas de San Mateo, San Renato, Mangalito del Mamoré, Puerto Geralda, donde las clases fueron suspendidas, “estamos en espera que construyan los espacios suficientes para que los maestros continúen el desarrollo de su trabajo”.
Hizo notar que se presenta una gran ausencia de estudiantes porque los padres de familia no permiten que sus hijos asistan, seguramente por la incomodidad del traslado, siguen en sus casas, en “chapapas”, o girado improvisado para pasar la época.
Todo lo anterior fue informado al Comité de Operaciones de Emergencia municipal para que tomen los recaudos pertinentes, “creemos que en el transcurso de las próximas horas resolveremos este inconveniente, porque mientras más se tarde crece, porque el agua sigue avanzando y muy pronto serán muchos más establecimientos afectados”, concluyó.
“La situación es grave porque las unidades educativas están dentro del agua, en Puerto Ballivián ni siquiera se estrenó, se improvisaron espacios para que los alumnos pasen clases, los maestros están presentes en sus horarios de trabajo”, dijo la autoridad educativa.
A lo anterior se suman las unidades educativas de San Mateo, San Renato, Mangalito del Mamoré, Puerto Geralda, donde las clases fueron suspendidas, “estamos en espera que construyan los espacios suficientes para que los maestros continúen el desarrollo de su trabajo”.
Hizo notar que se presenta una gran ausencia de estudiantes porque los padres de familia no permiten que sus hijos asistan, seguramente por la incomodidad del traslado, siguen en sus casas, en “chapapas”, o girado improvisado para pasar la época.
Todo lo anterior fue informado al Comité de Operaciones de Emergencia municipal para que tomen los recaudos pertinentes, “creemos que en el transcurso de las próximas horas resolveremos este inconveniente, porque mientras más se tarde crece, porque el agua sigue avanzando y muy pronto serán muchos más establecimientos afectados”, concluyó.
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